Habitantes del caserío Las Cañas no se han detenido de ayudar a Álex Sánchez y su compañera de vida, Maricela, luego de la muerte de Alejandro y Luis.
Durante la mañana del domingo, la comunidad hacía obras de mitigación en la zona, cortando árboles y removiendo aún tierra; mientras que un grupo de jóvenes ayudaba a mejorar el espacio donde los niños eran velados, pues las lluvias del sábado se filtraron en el espacio asignado para el sepelio.
Mientras, Maricela y Álex limpiaban lo poco que habían podido recuperar de la tienda que tenían en su casa.
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Los padres de familia se han mostrado agradecidos con las atenciones de vecinos, amigos y familiares, pero siguen en shock. "Todo fue en cuestión de segundos, es difícil superar esto que estamos pasando", expresó Sánchez, mientras recibía el pésima de habitantes de la comunidad.
Maricela relató que la noche del derrumbe había decidido cerrar temprano la tienda que tenía en la casa por la intensa lluvia y que su hijo pequeño estaba mocionado, porque al día siguiente le compraría zapatos nuevos, "te quiero mucho mami, me dijo, y luego nos preparamos para dormir".
El caserío está repleto de menores de edad, muchos en etapa adolescente. Es difícil para ellos procesar la muerte de sus amigos Alejandro y Luis; "en la tarde del viernes estuvimos jugando en la cancha, cuando nos dimos cuenta de lo que pasó", dijo Jared García.
García, quien junto a sus amigos ayudaba a instalar plástico negro sobre el techo del espacio donde se velaba a los menores, pues la noche anterior se les había filtrado el agua, dijo que por años durante las épocas lluviosas están pendientes de cualquier incidente, pues el río Las Cañas que pasa cerca de la zona ya se ha desbordado, y ha ocasionado daños, pero nunca habían vivido una situación así.}
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El sepelio en la comunidad continuó ayer y el entierro será este lunes, a las 10:00 am, en el antiguo cementerio de Apopa.
Aunque la familia Sánchez agradece el apoyo de protección civil y la alcaldía en este duro momento, la comunidad señaló el mal manejo de las instituciones durante la emergencia, pues aunque los esposos sabían a dónde estaban los cuerpos de los menores, las autoridades no prestaron atención y el rescate duró tres horas.
Así mismo, la comunidad expresó que las autoridades deben asegurarse de llevar a los lugares de desastres todas las herramientas y priorizar el rescate de las vidas de las víctimas, antes que los contenidos de redes sociales, pues "se preocuparon primero de las fotos y de hacer transmisiones en vivo", dijo una habitante.