No, las lluvias no son solo sinónimo de dengue y resfriados. En los inviernos copiosos hay que estar muy atentos para evitar una serie de padecimientos que son muy comunes de la época.
Y si bien el agua no es la que provoca los males respiratorios -sino los virus-, la humedad, el frío y los cambios constantes de clima debilitan tu sistema inmunológico.
Es por eso que en estos días hay que doblar los esfuerzos en materia de prevención, para protegerte a ti y a los tuyos de ciertas enfermedades que mal cuidadas pueden ser mortales.
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Según la bioquímica Marcela Lemos, magister en Microbiología Aplicada, con habilitaciones en Análisis Clínicas por la Universidad Federal de Pernambuco, en Brasil, la lluvia y las inundaciones pueden transmitir enfermedades como micosis, hepatitis, leptospirosis, y por esto se debe evitar entrar en contacto con el agua, especialmente durante el período de inundaciones".
En nota publicada en el sitio tuasaude.com, la experta alerta que en caso de ser necesario entrar en contacto con el agua para limpiar la casa o recuperar objetos en inundaciones, hay que "colocarse guantes y botas de plástico impermeables o como otra alternativa, cubrir las manos y pies con 2 o 3 bolsas plásticas, una por encima de la otra y amarrarlas a la muñeca y al tobillo con un cinta adhesiva fuerte, impidiendo el contacto con el agua contaminada".
Por supuesto, la humedad constante también es ideal para que las larvas de mosquito proliferen, por lo que más que nunca hay que destruir los criaderos de zancudos y usar los mosquiteros.
Además del dengue y la Infección Respiratoria Aguda (IRA), estos días de lluvia debés protegerte contra estas enfermedades:
LEPTOSPIROSIS
Es causada por la bacteria leptospira que se encuentra en aguas contaminadas con la orina de animales. Según el portal web de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos medlineplus.gov, se contrae si se consume o se entra en contacto con agua o suelo contaminado. "La infección ocurre en climas cálidos. La leptospirosis no se propaga de una persona a otra, excepto en casos muy poco comunes".
Entre los síntomas figuran tos seca, fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular, escalofríos, náuseas, vómitos y diarrea. Estos se pueden complicar y generar enrojecimiento de los ojos, rigidez de los músculos, erupciones cutáneas y dolor de garganta. Lo mejor es consultar ante los primeros síntomas.
CÓLERA
Es "una enfermedad bacteriana que, por lo general, se propaga a través del agua contaminada. El cólera provoca diarrea intensa y deshidratación". Si no se trata a tiempo, puede ser mortal en cuestión de horas, incluso en personas previamente sanas, detalla el sitio de la reconocida Clínica Mayo. La tifoidea es otra enfermedad del sistema digestivo que suele tomar fuerza en época lluviosa.
Como cualquier diarrea, es letal si se descuida la hidratación de los pacientes. "La diarrea producida por el cólera a menudo tiene un aspecto pálido y lechoso que se asemeja al agua en la que se ha enjuagado arroz". Los vómitos aparecen en la primera etapa y pueden durar horas. Ante los primeros síntomas, acude al médico.
MICOSIS
La bioquímica Lemos explica que la "micosis es una enfermedad de la piel causada por los hongos, pudiendo aparecer después de períodos de lluvia debido a que hay mayor humedad. Los síntomas varían según el lugar en el que aparece, "pudiendo haber comezón, aparición de manchas rojas en la piel y alteración de la coloración y forma de la uña, en el caso de micosis en los dedos de las manos o de los pies".
Para contrarrestar la micosis, lo primero es mantener seco el cuerpo. Luego, hay que consultar al dermatólogo para conocer que tipo de hongos se padece y recibir el mejor tratamiento para combatirlo.
TAXOPLASMOSIS
La provoca el parásito Toxoplasma gondii. La infección en humanos puede provenir de aguas contaminadas con orina de animales infectados, tierra contaminada, transfusiones de sangre, comer carne cruda o mal cocida. En el portal de medlineplus.gov, se detalla que si bien no suele causar síntomas, "si los hay, suelen aparecer alrededor de 1 a 2 semanas después de entrar en contacto con el parásito. La enfermedad puede afectar el cerebro, el pulmón, el corazón, los ojos o el hígado".
Sintomatología que debes valorar: inflamación de ganglios, dolor de cabeza, fiebre, dolor de músculos, dolor de garganta y alteraciones visuales, entre otros. Lo ideal es visitar al especialista para descartarla.
HEPATITIS A
La hepatitis A es una enfermedad del hígado causada por el virus de la hepatitis A (VHA), según información proporcionada por el portal web de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC). "Las personas que contraen hepatitis A pueden sentirse enfermas durante algunas semanas o varios meses, pero generalmente se recuperan por completo y no presentan daño hepático duradero. En casos raros, la hepatitis A puede provocar insuficiencia hepática e incluso la muerte".
No todas las personas con hepatitis A presentan síntomas, aunque los adultos tienen más probabilidades de presentarlos. Si se desarrollan, generalmente aparecen entre 2 y 7 semanas después de la exposición. Algunos son: orina oscura o heces color arcilla, diarrea, sensación de agotamiento, fiebre, dolor de articulaciones, perdida del hambre, piel u ojos amarillos. No dudes en consultar a un especialista.