Recientemente, los científicos de la Universidad de Hull y Liverpool (Reino Unido), de la Universidad de Georgetown y de Hawai (EEUU) publicaron un estudio en PLOS Biology, en el que informan sobre los cambios experimentados en océanos y zonas costeras de forma simultánea.
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Debido a esto, varias criaturas marinas como medusas, crustáceos, caracoles y percebes cohabitan junto con los desechos plásticos que flotan dentro del mar.
En ese sentido, dichos hallazgos determinaron que la contaminación por medio de los desechos plásticos podría resultar en un mundo oceánico distinto e inesperado y, a su vez, permitir la formación y generación de nuevos hábitats flotantes para las especies marinas, que normalmente no serían capaces de sobrevivir en mar abierto.
Sin embargo, las grandes cantidades de desechos y contaminantes flotantes hechos por el mismo hombre, se concentran como "parches de basura".
De modo que, estos alteran el balance de las funciones ecológicas y la convergencia de vida marina, ya que en altas densidades puede ser crítica para muchas especies bentónicas y que varios organismos dependan del consumo de los desechos.
En el año 2019, los científicos se tomaron 80 días para navegar entre ese parche y aprender más sobre las criaturas marinas que sobreviven en ese entorno, pero para su sorpresa descubrieron que existían muchas especies dentro de esos desechos y a través de los cuales se destacan, las balsas marinas (Velella sp ), botones marinos azules (Porpita sp) y caracoles marinos violetas (Janthina sp).
“El parche de basura es más que eso. Es un ecosistema, no por el plástico, sino a pesar de él”, señaló Rebecca Helm, investigadora de Georgetown y una de las autoras de la investigación publicada.
De acuerdo con los científicos, es importante reconocer que las industrias de altamar y las actividades procedentes de estos mismos son de gran impacto en el ecosistema y en la superficie del océano Pacífico. “Nuestro estudio destaca el valor de la ciencia comunitaria y su importancia en el estudio de la vida en la interfaz aire-mar”, expresó la especialista.
En efecto, saber a ciencia cierta que los desechos plásticos pueden representar una seria amenaza para los seres vivos, pero un nuevo estudio revela que algunas especies marinas pueden usarlo a su favor como un medio de adaptación y evolución.