Líbano fue, hasta la llegada al poder en Irán del enloquecido ayatola Jomeini, una nación pacífica donde cristianos y musulmanes convivían en paz, siendo visitada para admirar su capital, Beirut, y recorrer sus interesantes barriadas, llegar hasta la Universidad Americana y de allí a sus grandes y espléndidos hoteles frente a la playa.
Desde la caída del Sha de Irán en 1979 vinieron todos los horrores sobre la región: los fanáticos seguidores de los ayatolas se tomaron la embajada de Estados Unidos en Teherán y mantuvieron secuestrados por 444 días a los empleados; se desencadenó la guerra entre Irán e Irak; Israel invade parte del Líbano ante los ataques terroristas desde este último país; surge el Hezbolá ("partido de dios") con apoyo de Irán y hace estallar un cuartel general de las fuerzas de paz de la ONU en Beirut en 1983 que mató a centenares de militares estadounidenses y de otros países.
Líbano vive momentos de terror, desplazamientos de civiles, destrucción a causa de las operaciones por décadas de la banda terrorista Hezbolá y los ataques a Israel, lo que llevó a una fulminante respuesta de Tel Aviv, el descabezamiento de dos de los principales cabecillas de Hezbolá y muchos de sus militantes, además de los cientos de muertos causados por los aparatos de comunicación que estallaban en las manos, piernas, estómago, rostros de los portadores.
Haber podido localizar al principal cabecilla de Hezbolá y al segundo en comando muestra el alto grado de eficiencia del sistema de recopilar inteligencia, lo que ha llevado a que el sucesor, Hashem Safi al Din, se esconda debajo de tierra para que no le caiga un misil sobre el turbante, como en su momento en una operación similar fulminó al encargado de dirigir las operaciones terroristas iraníes en el mundo, un criminal que los clérigos iraníes consideran "mártir"...
El Líbano, historia antigua y encanto
Para muchos, el conjunto arquitectónico que el emperador romano Adriano construyó para honrar al dios Baal, conocido como Baalbeck, merita un viaje a Líbano, a lo que se agrega que la distancia hacia la frontera con Siria es relativamente corta.
Cerca de Baalbeck se conservan seis cedros del original bosque de cedros que eran muy apetecidos para construir ataúdes, pues su madera es prácticamente incorruptible.
Hay clínicas médicas en Estados Unidos que honran esa memoria tomando el nombre de "Cedars of Lebanon", como propiciación de la recuperación de la salud.
Además de Beirut en Líbano se encuentra la ciudad de Biblos, donde la tradición fija el origen del alfabeto actual, y la ciudad de Canaán, desde donde los fenicios salieron a fundar ciudades en el mar Mediterráneo. La más famosa de ellas fue Cartago, que durante tres siglos se apoderó de gran parte de España, originando las "Guerras Púnicas" entre ambas potencias, lo que llevó a la invasión de Italia por Aníbal Barca, quien cruzó los Alpes con un gran ejército y venció a los romanos en Cannae.
En esos años el estadista romano Catón solía terminar sus discursos, indistintamente del asunto que se tratara, con la frase "Cartago delenda est", Cartago debe ser destruida, borrada de la faz de la tierra.
Después que Aníbal fue forzado a salir de Italia, una fuerza romana encabezada por Escipión (a quien más tarde lo distinguieron con el apelativo de "Africano") se apostó frente a Cartago antes de iniciar batalla, pues luego de la derrota de Cannae los romanos estudiaron las tácticas de Aníbal y encontraron que su "arma decisiva" fue la caballería, lo que usó Escipión contra Aníbal.
La historia relata cómo entre ambos generales se fraguó una entrañable amistad, lo que llevó a Escipión a propiciar la fuga de Aníbal y protegerlo siempre, versus tomarlo prisionero y celebrar en Roma un "triunfo" exhibiéndolo prisionero con las armas incautadas.