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Hay que recuperar la enseñanza de artes, música, educación física

Sin artistas, creadores, intelectuales, personas pensantes, las naciones van a la deriva; el cultivo de la música, de la buena música, prepara a sus oyentes a comprender estructuras abstractas, con lo cual serán mejores técnicos, actores, ingenieros, creadores de riqueza y, por lo mismo, parte de las cadenas de producción que unen toda la actividad económica de un país y del mundo...

Por El Diario de Hoy |

La enseñanza de artes, al igual que la educación física, son esenciales para la formación de niños y jóvenes en nuestro país, señala el profesor Daniel Rodríguez, director del centro escolar Cantón El Cedro, de Panchimalco, lo que no se cumple desde que se mantienen relegados el CENAR y la educación física en las escuelas e institutos públicos.

A lo anterior se suma lo que declaró el Ministro de Educación: que la enseñanza en las escuelas públicas es tan buena como en los colegios privados, una aseveración que con seguridad ni él mismo cree, pero que es la forma que tiene para halagar al régimen bukeliano, cuidar su “chamba”.

Poco falta para que los funcionarios del régimen se postren al suelo como los islámicos...

Programas de educación física no necesariamente requieren de implementos —saltar, correr en círculos, hacer sentadillas es sistematizar lo que los niños en sus juegos hacen—; simplemente se organizan tales actividades, asunto que vamos a desarrollar en futuras páginas educativas para guiar a profesores de esa materia en todo el territorio.

La formación de artistas, músicos, pintores, escultores no puede dejarse a la mano de Dios, a lo que empíricamente, por sí mismos, las personas con tal vocación hagan por sí solas.

Leonardo, un genio universal, fue alumno de Andrea del Verrochio (Verr- ochio significa el ojo que ve la realidad con precisión), como Miguel Ángel   fue discípulo de Luca Signorelli y Giotto de Cimabue; sin ir de la mano de tales geniales mentores no está claro cuán lejos pudieron haber llegado por sí mismos...

En un paseo por las afueras de Florencia, Cimabue vio a un jovencito dibujar figuras en la tierra, por lo que de inmediato tomó al niño bajo su protección, un genio que dio un nuevo giro al arte de su tiempo. El Campanile de la Catedral de Florencia es la obra de Giotto que los viajeros siempre    contemplan en su plena gloria.

Sin artistas, creadores, intelectuales, personas pensantes, las naciones van a la deriva; el cultivo de la música, de la buena música, prepara a sus oyentes a comprender estructuras abstractas, con lo cual serán mejores técnicos, productores, ingenieros, creadores de riqueza y, por lo mismo, parte de las cadenas de producción que unen toda la actividad económica de un país y del mundo...

En la medida en que la nave estatal de una nación esté en manos de personas educadas, capacitadas, mejores serán sus rumbos y con mayor habilidad esquivarán malvadas tentaciones y mortales arrecifes....

Una sociedad va elevándose en la medida que deja lo chocarrero

La creación del canal educativo, el Ocho, tuvo como propósito difundir cultura, ser un vehículo que transmita conocimientos, que exponga al público obras de arte, difunda buena música y enseñe, a ciertas horas, la diferencia entre lo que solistas —piano, violín, cello— tocan, hasta obras sinfónicas, música de cámara, óperas.

 Un canal así es un contrapeso a la música de cantina, de fiestones...

Siempre hay un momento en que una persona aprende a distinguir entre un cartel de propaganda y una obra pictórica, entre rancheras y valses vieneses, como también entre valses vieneses y sinfonías de Mozart y Beethoven...

 El desarrollo y progreso de las sociedades se marca en la medida que se va superando lo chocarrero y se adoptan modos más elevados de vida...

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Educación Musical Opinión

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