El comunismo y algunos populismos totalitaristas contemporáneos persiguen, con sus variantes, a las sociedades humanas partiendo de la postura de que “lo mío es mío, y lo tuyo también es mío”.
Se cuenta que en la antigua Grecia (posiblemente como personaje de una comedia) una agitadora predicaba lo de siempre: hay que apropiarse y repartir los bienes de “los ricos”, usufructuarlos sin tener que trabajar, etcétera.
La pregunta que se planteó entonces fue “entonces ¿quién va a trabajar los campos, producir bienes…?”. Su respuesta fue inmediata: “Los esclavos se encargarán de eso…”.
En ese entonces, como a lo largo del tiempo, los comunistas y los populistas modernos prometen liberar al pueblo “de sus cadenas” como asimismo de sus relojes, sus gargantillas, de todas sus posesiones para quedarse disfrutando de bienes y riqueza ajena…
Al igual que el lobo que se cubrió con la piel de una oveja para engañar (fábula de Esopo), ahora pretenden ser “socialistas” y “progresistas” y, para atacar a quienes delatan sus maniobras y engaños, han acuñado el término de “neoliberalismo”, una forma de “desprestigiar” o satanizar el liberalismo, vale decir la doctrina apoyada en la libertad humana y la economía de mercado, en sus inicios planteada por Adam Smith en 1776 y que dio lugar a la llamada “Revolución Industrial” que fue una consecuencia del capitalismo, cuando el capital fue generando máquinas y por vez primera en la historia liberando a grandes masas humanas del hambre.
En este punto es importante cuestionar por qué algunas agencias de noticias se empeñan en llamar “progresistas” a personajes como Maduro o los Castro u Ortega. ¿Qué tiene de “progresista" masacrar, saquear y llevar a pueblos enteros a la miseria y la muerte como ellos lo han hecho?
El hambre no termina de erradicarse debido a la intervención de dirigistas, cleptoburocracias, de nuevas maneras de robar y destruir que impiden la erradicación efectiva del hambre, de carencias como la falta de vivienda…
Robar la gargantilla, la cadena de oro del reloj… hay nuevas formas de caer encima de bienes ajenos, como es embolsarse los ahorros de la población trabajadora, los recursos destinados a la enseñanza, de limitar o caer encima de la asistencia a madres encintas y proteger con vacunas a sus niños al nacer, vacunas esenciales como contra la tos ferina, el sarampión…
Es seguro que Putin condecore a Xi con la Orden de Iván el Terrible
Disponer al antojo de fondos municipales, al igual que despedir trabajadores sin reconocerles indemnización alguna, es parte de la nueva “visión del mundo”, aunque se jure con los veinte dedos que el saqueo encaja con la democracia más democrática no solo del planeta, sino de la galaxia.
Bien dijo Margaret Thatcher: cuando tienen poder roban a manos llenas, como el presidente Milei lo dijo en Madrid refiriéndose a personajes políticos, en Madrid donde hay una avenida General Perón…
En China, nación oficialmente comunista, el dictador Xi condecoró al criminal de guerra y asesino serial Putin, posiblemente para destacar la espantosa mortandad que perpetra en Ucrania y la persecución de las voces disidentes en Rusia, lo que también ocurre en China, lo que posiblemente haga que Putin condecore a Xi con la Orden de Iván el Terrible, uno de los masacradores más feroces de la historia…