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Reducción de riesgos y daños en salud: con opciones

Con un rival tan poderoso producido en el cerebro mismo, en el presente, los científicos de la salud se las tienen que ingeniar para lograr el abandono de las sustancias nocivas o crear opciones para que el consumo sea menor, de tal manera que los daños a la salud sean los menos posibles.

Por Mirella Schoenenberg de Wollants
Nutrióloga y abogada

La salud es la condición indispensable en el humano para poder producir, generar, moverse y desplegar todas las potencialidades de las que estamos llenos, y poder, por ende, gozar de la existencia que nos auto determinamos. La salud es un requisito para la felicidad.

Sin embargo, no es fácil conservarla….o recuperarla cuando se ha perdido.

Como un juego sarcástico y macabro, la salud, al salir al mundo empaquetada dentro del cuerpo humano, tal cual Pinocchio, se encuentra inmersa en un mundo donde son muchos los zorros y los gatos que lo acechan para robarle ese estado de bienestar y tranquilidad, que, a pesar de los consejos de Gepetto y Pepe Grillo, es muy susceptible a adentrarse en ese juego del cual muchas veces no puede salir.

Esa salud, como ideal de bienestar físico, mental, social y medioambiental, está siempre acechada por tentaciones que van a destruirla y que han sido tema de preocupación, estudio y búsqueda de soluciones por humanos que han trabajado arduamente para encontrarles una salida desde hace mucho tiempo.

Es el caso al que voy a referirme, dado el orden cronológico en que se ha invertido esfuerzos, de las adicciones a sustancias.

Décadas, afanes, sacrificio, sudores, dineros y trabajos han sido invertidos, en ayudar a miles de personas a salir de la dependencia de sustancias específicas, que deterioran las vidas de los que están atrapados con ellas y de aquellas que viven cerca de ellos.

Éxitos y fracasos han acompañado ese camino, donde los dedicados a ayudar a esos humanos secuestrados en sus mentes, han tenido que ir cambiando las estrategias terapéuticas en un afán de evitar mayores daños, tanto físicos, como mentales, a los adictos, así como al entorno, a esa sociedad, ese conglomerado que rodea al secuestrado y que por azares del destino fueron tocados por ese mal.

Actualmente, con base a experiencias, investigaciones, observaciones, análisis de datos y evidencias, después de dedicarse muchos años a la prohibición del consumo de sustancias adictivas; científicos de muchos lugares han llegado a la conclusión que, en los casos reacios al abandono de la dependencia a las sustancias, el camino a seguir es la creación de opciones que disminuyan los riesgos y daños a la salud del adicto y de sus cercanos.

En el caso del tabaquismo, a pesar que el número de consumidores disminuyó considerablemente en algunos puntos del planeta, como es América Latina; hay regiones donde el consumo se mantiene e incluso crece año con año, como es el caso de Europa y Asia. Son miles de adictos a la nicotina que buscan ayuda para abandonar la sustancia pero no lo logran, sin dejar de mencionar los miles que no quieren abandonarlo.

Los expertos han profundizado en las razones, encontrando, entre otras cosas, que a nivel cerebral, en el núcleo accumbens, que es el lugar donde hacen efecto sustancias adictivas como la marihuana, se produce la liberación de dopamina; un neurotransmisor que provoca placer, satisfacción, complacencia. Con la nicotina del tabaco sucede lo mismo, y también con los alimentos, el alcohol, la música y la actividad sexual.

Con un rival tan poderoso producido en el cerebro mismo, en el presente, los científicos de la salud se las tienen que ingeniar para lograr el abandono de las sustancias nocivas o crear opciones para que el consumo sea menor, de tal manera que los daños a la salud sean los menos posibles.

El tema de las psicodependencias no es para nada sencillo de abordar, debiendo tenerse en cuenta que muchas veces no se trata de simple voluntad, o en la forma negativa, de necedad; sino que hay muchas veces una real imposibilidad para realizar los cambios que convienen (sin lugar a dudas) a la persona, por lo cual generar opciones de salidas alternas, con miras a disminuir el nivel de los daños que se pueden sufrir o para prevenir otras complicaciones, se convierte en la verdadera prioridad.

En futuros artículos, seguiremos hablando más sobre este tema. Hasta pronto.

Médica, Nutrióloga y Abogada

mirellawollants2014@gmail.com

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