Por Un nuevo año escolar comienza. Es la oportunidad para que el Ministerio de Educación y las instituciones educativas privadas se unan para impulsar la educación ambiental como se debe, con buenas prácticas ambientales y el respeto a la naturaleza. El medio ambiente, menospreciado, que se ve con tanta inferioridad por los negacionistas del cambio climático, en su mayoría gente adulta que egoístamente no les importa dejar un mundo en destrucción por la contaminación a las nuevas generaciones.
Ciertamente, y lo podemos comprobar, esta generación está más inclinada por el respeto al medio ambiente, con mayor acceso a la información que otras generaciones, que para informarse lo hacían porque en sus colegios y escuelas les pedían hacer tareas y estos tenían que ir a investigar a las enciclopedias (Británica, Larousse, entre otras) o a las bibliotecas de colegios .
Ahora los niños y jóvenes cuando tienen alguna duda o curiosidad buscan por sí solos en sus dispositivos, y como esponjas absorben el conocimiento y la información, casi en tiempo real, el problema es que hay un bombardeo de información en las redes sociales, los temas se segmentan y dependerá del interés de cada quien ahondar más. Pero la información ahí está, amplia y en abundancia.
Esta es una generación que va a dar un mayor valor al tema ambiental, a la realidad del cambio climático, muchas instituciones educativas ya se están dejando guiar por esa brújula de hacia dónde va la educación ambiental y sabiamente están guiando a los jóvenes hacia esos temas y problemáticas. Preparándose con más información, más actividades y buscando asesoría respecto al tema.
A otros (centros educativos) les es indiferente, y quizás no han podido obtener mayor asesoramiento al respecto, información, o porque a sus directores les va y les viene el tema.
En cuanto a la educación superior, ya hay universidades que están ofreciendo carreras relacionadas a las energías renovables y al medio ambiente, esas carreras son futuristas. Además promueven eventos, coloquios, estudios científicos, ponencias, cátedras que tiene que ver con el cambio climático y el medio ambiente; mitigación.
Las próximas décadas serán complejas para el clima, por no decir catastróficas. La población irá creciendo, en nuestro país habrá menos espacio para vivir y mayor demanda de vivienda, vamos a tener que preparar niños y jóvenes capaces de dar soluciones a problemas complejos en territorios reducidos. Hay que preparar a la juventud en la realidad y que no vivan en burbujas ni en fantasías. Gobierno, empresas privadas, sociedad civil, medios de comunicación deben encarar ese compromiso de mostrar la realidad que vive nuestro país desde la óptica climática y las amenazas que existen para la población.
En el marco de un programa educativo de conciencia ambiental debe existir la contemplación y la valoración de lo que poseemos en recursos naturales, áreas reforestadas, recursos hídricos y Biodiversidad. Y por otra parte, las acciones a tomar para la conservación de estos recursos, el observatorio y la regeneración que se pueda llevar a cabo con muchas actividades, y que cada vez los centros educativos y las universidades se comprometan más al tema ambiental, que es parte del futuro y desarrollo del país.
Las ferias o expos de ciencias enfocadas al medio ambiente, un semillero de proyectos innovadores en materia ambiental, el surgimiento de una nueva generación de científicos en el país. Las jornadas de reciclaje, la reducción del plástico y la reutilización de otros materiales es muy importante. Factores que realmente transformen la visión actual de nuestra relación con el ecosistema. Un instituto del Océano sería algo futurista y prometedor, tenemos bastante costa pacífica como para no procurar la salud y la estabilidad del océano, que muchos disfrutamos, amamos y promovemos como destino turístico.
La evolución en la enseñanza va tener que ir de la mano con el tema ambiental, sobre respeto y de conservación. Debemos fomentar una sociedad que se preocupe por regenerar, por ser productiva pero con base en los principios de la sostenibilidad. No creo que estas iniciativas alejen o marquen una distancia con nuestro país por parte de los organismos internacionales, ONGs ambientalistas o países cooperantes. Es más, puede ser el momento de incentivar aún más al tema ambiental y fortalecer ese compromiso, para que no solo se quede en discurso. Comunidad internacional, no escatimen esfuerzo para el apoyo de la educación ambiental de la niñez y juventud en nuestro país.
En X @Chmendia
Medio Ambiente: Evolución en la enseñanza
Por Carlos F. Imendia.
Un nuevo año escolar comienza. Es la oportunidad para que el Ministerio de Educación y las instituciones educativas privadas se unan para impulsar la educación ambiental como se debe, con buenas prácticas ambientales y el respeto a la naturaleza. El medio ambiente, menospreciado, que se ve con tanta inferioridad por los negacionistas del cambio climático, en su mayoría gente adulta que egoístamente no les importa dejar un mundo en destrucción por la contaminación a las nuevas generaciones.
Ciertamente, y lo podemos comprobar, esta generación está más inclinada por el respeto al medio ambiente, con mayor acceso a la información que otras generaciones, que para informarse lo hacían porque en sus colegios y escuelas les pedían hacer tareas y estos tenían que ir a investigar a las enciclopedias (Británica, Larousse, entre otras) o a las bibliotecas de colegios .
Ahora los niños y jóvenes cuando tienen alguna duda o curiosidad buscan por sí solos en sus dispositivos, y como esponjas absorben el conocimiento y la información, casi en tiempo real, el problema es que hay un bombardeo de información en las redes sociales, los temas se segmentan y dependerá del interés de cada quien ahondar más. Pero la información ahí está, amplia y en abundancia.
Esta es una generación que va a dar un mayor valor al tema ambiental, a la realidad del cambio climático, muchas instituciones educativas ya se están dejando guiar por esa brújula de hacia dónde va la educación ambiental y sabiamente están guiando a los jóvenes hacia esos temas y problemáticas. Preparándose con más información, más actividades y buscando asesoría respecto al tema.
A otros (centros educativos) les es indiferente, y quizás no han podido obtener mayor asesoramiento al respecto, información, o porque a sus directores les va y les viene el tema.
En cuanto a la educación superior ya hay universidades que están ofreciendo carreras relacionadas a las energías renovables y al medio ambiente, esas carreras son futuristas. Además promueven eventos, coloquios, estudios científicos, ponencias, cátedras que tiene que ver con el cambio climático y el medio ambiente; mitigación.
Las próximas décadas serán complejas para el clima, por no decir catastróficas. La población irá creciendo, en nuestro país habrá menos espacio para vivir y mayor demanda de vivienda, vamos a tener que preparar niños y jóvenes capaces de dar soluciones a problemas complejos en territorios reducidos. Hay que preparar a la juventud en la realidad y que no vivan en burbujas ni en fantasías. Gobierno, empresas privadas, sociedad civil, medios de comunicación deben encarar ese compromiso de mostrar la realidad que vive nuestro país desde la óptica climática y las amenazas que existen para la población.
En el marco de un programa educativo de conciencia ambiental debe existir la contemplación y la valoración de lo que poseemos en recursos naturales, áreas reforestadas, recursos hídricos y Biodiversidad. Y por otra parte, las acciones a tomar para la conservación de estos recursos, el observatorio y la regeneración que se pueda llevar a cabo con muchas actividades, y que cada vez los centros educativos y las universidades se comprometan más al tema ambiental, que es parte del futuro y desarrollo del país.
Las ferias o expos de ciencias enfocadas al medio ambiente, un semillero de proyectos innovadores en materia ambiental, el surgimiento de una nueva generación de científicos en el país. Las jornadas de reciclaje, la reducción del plástico y la reutilización de otros materiales es muy importante. Factores que realmente transformen la visión actual de nuestra relación con el ecosistema. Un instituto del Océano sería algo futurista y prometedor, tenemos bastante costa pacífica como para no procurar la salud y la estabilidad del océano, que muchos disfrutamos, amamos y promovemos como destino turístico.
La evolución en la enseñanza, va tener que ir de la mano con el tema ambiental, sobre respeto y de conservación, debemos de fomentar una sociedad que se preocupe por regenerar, por ser productiva pero en base a los principios de la sostenibilidad. No creo que estas iniciativas alejen o marquen una distancia con nuestro país por parte de los organismos internacionales, ONGs ambientalistas o países cooperantes, es más, puede ser el momento de incentivar aún más al tema ambiental y fortalecer ese compromiso, para que no solo se quede en discurso. Comunidad internacional, no escatimen esfuerzo para el apoyo de la educación ambiental de la niñez y juventud en nuestro país.
En X @Chmendia