Por En esta columna de opinión hare observaciones puntuales, sin ocultar nuestras preocupaciones, las circunstancias actuales del país y su realidad con la consecuente pérdida de valores de las instituciones clásicas, las cuales caen como hojas en otoño. (“Republica imperfecta, pero Republica al fin”).
Esta presente una decadencia política, legitimada por el uso de la democracia: Consiste en ganar elecciones mediante una lucha comunicativa, juegan al héroe de una novela apuestan a (yo soy la democracia) al súper héroe, donde la población solo cuenta como referente de los votos, el resultado es que a la democracia le va remal: la democracia es la responsable de todo, si elegimos un tipo como Maduro, Ortega, AMLO, Uribe Evo, cristina, la culpa es de la democracia, en ningún caso de su cinismo, ineptitud, de su populismo, de su autocracia, de su autoritarismo. “Están estirando el elástico demasiado”
La comunicación política y de gobiernos, gana espacio construyendo mensajes, privilegiando la mentira y la manipulación, desarrollando frases agradables al oído, pero alejadas de la realidad con mucho éxito, haciendo pensar a los gobernados que esa información es ya la realidad; asumiendo que con un tuit las cosas van a suceder, pero lo que tenemos en la realidad son inconsistencias, abiertas contradicciones, De esta manera, la mentira y la manipulación se hacen responsables de la democracia, la política, la economía, lo social, y la democracia se vuelve inviable. Este abuso definirá la calidad de la democracia y sus instituciones. El sistema de salud ya no da más. Las pensiones son un asco. Los servicios básicos. Las municipalidades, La deuda del país, ya no aguantan. Sueldos de millones de salvadoreños que apenas sobreviven para comprar sus alimentos, (además del peligro de un poder sin barreras). Hace más de 22años, los venezolanos hicieron caso omiso, los salvadoreños vamos por el mismo camino a un paso más acelerado.
No se puede defender lo indefendible, el riesgo es que sus hijos, los hijos de sus hijos, los de las familias, serán las víctimas de esa narrativa. La realidad manipulada y el olvido de la historia son los grandes instrumentos de esta situación, están en una posición dominante lo que permite manipular la historia, sin querer comprender que el pasado sirve para construir un futuro mejor
La concentración de poder abre las puertas a la corrupción (el poder corrompe, el poder absoluto corrompe absolutamente), el uso de los recursos del estado premia a los amigos y castiga a los enemigos, el control de los medios para ensalzar al gobernante, censurar noticias inconvenientes, desaparecen los pesos y contra pesos, se violenta el estado de derecho y la libertad de expresión brilla por su ausencia
Ahora que todo se puede verificar, debería impedir que la mentira prospere, la pregunta es ¿por qué la mentira penetra como verdad? Lo primero. es por la insistencia en la mentira. Segundo: la descalificación de los que la debaten y Tercero: hacer que las personas dejen de tener intermediarios que los acerquen a fuentes confiables. El gobernante dice la mentira, el ciudadano no se informa, no lo quiere hacer a través de los medios profesionales sino de manera directa del mentiroso, de fuentes controlados por el o afines a su causa. Hay una ciudadanía que quiere aceptar como verdad la mentira, lo que le permite ver el mundo como él quiere, aunque no haya tal; los gobernantes y los políticos que se mueven en este modelo de comunicación utilizan sistemáticamente, las medias verdades, dicen parte de estas, pero esconden la otra, se da algo sin comprobarlo, además de la yuxtaposición de imágenes diciendo con ellas que estas son reales, algo que no es. Hacen relevante lo irrelevante. Atacan al adversario sin datos duros, a través de hechos insignificantes lo magnifican y lo convierten en un tema central. La censura ya no la ejerce el gobierno directamente, sino las redes de miles de ciudadanos, manipuladas por estos, de inmediato reaccionan con linchamientos, lo que contribuye a crear la espiral del silencio, lo que termina por eliminar las posiciones incomodas al poder. Los críticos, los opositores, medios se dan cuenta lo arriesgado de sostener sus posiciones. No podemos aceptar ataques de ningún barrabas con pretensiones de apóstol
Pregunto al lector ¿opera este modelo en nuestro país?
Estoy convencido que en nuestro país se sigue esta modalidad, busquémosla entre el amor popular (soy el que el pueblo ama y enviado por dios), el melodrama de una telenovela (vengo a liberarlos de los villanos, los políticos de siempre) y el súper héroe, cuya propuesta tiene más de comunicación que de política. “Mienten explícitamente, es toda una vergüenza, hay una plaga de mentirosos”
Yo creí que las lecciones aprendidas, nos llevarían por rutas distintas. La verdad, no hemos aprendido las lecciones de la historia. El pasado no debe pasar por encima de nuestro futuro.
General (r) de la Fuerza Armada