Ruestro escritor, artista y musicólogo Carlos Balaguer, en su Columna del martes 30 de mayo de 2023 hace referencia a la extraordinaria bailarina Morena Celarié, cuyo nombre propio era Morena Guadalupe Celarié Noruega.
Comienza así: “Prólogo de ‘Talismán : la Danza de bailarina Morena Celarié. Celarié, baletista salvadoreña que nació el 20 de abril de 1922, y murió trágicamente el 21 de abril de 1972 en la cúspide de su carrera".
“Es decir ¡la danza de su vida duró sólo un día! Como en el instante del vuelo de una mariposa de la flor del campo y el alma humana. Ella me inspiró esta leyenda. Danzarina del aire que tuvo la vida fugaz de un sueño o del mismo amanecer de la ilusión”.
“Desde los cuatro años formó parte de grupos de danza colegiales, iniciando desde entonces su danza al firmamento de su anhelo. Soplo del destino; suspiro de amor; vuelo de la escena, coronó su exitoso ballet fundando la ‘Escuela de Danza Morena Celarié”.
“En la cumbre de ‘La Puerta del Diablo’ encontramos en los desfiladeros su cuerpo sin vida. Mariposa herida de su alma, queriendo –quizá- alzar vuelo desde allá al distante mar pacífico de su frágil y azul destino”.
Morena Celarié, te fuiste sin deciros adiós. Todos te queríamos con el alma encendida de cariño. Morena de las mañanitas; Morena del atardecer; Morena de las noches estrelladas, que bajabas del firmamento estrellitas de mil colores, para sonreírles y jugar con ellas, esparciéndolas con tus manos blancas, de paz, de armonía y de concordia.
Morena de espíritu musical, que con tus brazos de ensueño, lanzabas notas musicales platinadas en el pentagrama de tu alma, colmada de amor por todos los seres humanos y también por las aves canoras que siempre te despertaban en las madrugadas.
Morena de bellas rosas rojas perfumadas, que cultivaste en el jardín musical de tu vida danzarina, y que pétalo por pétalo, las esparcías, sonriente, queriendo perfumar tu mundo, ese mundo de alegría y de nostalgia que te rodeó en la danza y esos movimientos tan tuyos, cual mariposa escarlata que vuela y vuela, contenta, sobre los jardines más bellos.
Nos dejaste, pero tu recuerdo permanecerá por siempre en nuestros corazones, agradecidos por todo lo que aportaste en el divino arte del ballet, con su danza de alegría, de amor, de paz y de concordia.
Morena Celarié, orgullo del ballet nacional, honraste a la Patria salvadoreña con tu arte. ¡Descansa en santa Paz!
Maestro, psicólogo, gramático.