La actualidad nos traslada estimados/as lectores al Oriente Medio, siendo los protagonistas del conflicto suscitado Israel y Hamas, en la franja de Gaza. El conflicto se traslada muchísimos años atrás, siendo la Franja de Gaza aquel territorio intermedio en ese punto de choque y encuentro del conflicto social y armado en curso entre israelíes y palestinos, por el control de la tierra de Palestina.
La Franja de Gaza ha sido durante décadas la tensión entre Israel y Hamas, que controla gran parte de la franja de Gaza desde 2007 aproximadamente, lo que ha sido parte de un ir y venir de lanzamientos de cohetes, muertes y pérdidas de vidas humanas entre ambos bandos, sin lograr un resultado favorable para nadie, solamente dolor y tristeza en miles de familias que año tras años ven cómo seres queridos pierden sus vidas en este enfrentamiento de nunca acabar, debido a las disputas territoriales, políticas y aspectos religiosos que se pagan con la vida de personas inocentes y sufrimiento de ambas partes.
Muestra de este último enfrentamiento que se está viviendo, se registran un aproximado de 1,537 fallecidos y más de 6,000 heridos en Gaza… datos aterradores.
Por ello, se vuelve menester que la comunidad internacional actúe de manera inmediata, pero sobre todo se fomente a la reflexión y la conciencia a los actores que participan en este conflicto que se vive, buscar acuerdos y dialogo poniendo por encima de cualquier diferencia, la vida humana. Como ciudadanos del mundo se nos insta a solidarizarnos e insistir al diálogo y cese al fuego, para evitar más tragedias humanas.
No olvidemos que las guerras causan grandes sufrimientos humanos en la salud física, psicológica y en la integridad de la población, además destruyen el ecosistema y el entorno en el que vivimos, pagándose las consecuencias a corto o largo plazo, sin oportunidad de regresar y haciéndose cada vez más difícil ponerse de pie después de la odisea y la catástrofe.
Los conflictos constituyen un verdadero desastre para la humanidad. Un caos provocado por el hombre puede ser contraproducente para la extinción de la vida y la desorganización social, afectándola desde todos los puntos de vista. Esperemos que la comunidad internacional haga eco y acciones palpables que sean perdurables y sostenibles en el tiempo, pero sobretodo, los lideres que se encuentran en conflicto, con el objetivo de buscar respuestas y acuerdos para el cese del conflicto por el bien de la humanidad y el mundo.
Las guerras únicamente son salidas cobardes a los problemas, trayendo consigo más dificultades para subsistir en un mundo que cada día que pasa, se enfrenta a diversos retos. Si quieres hacer paz con los enemigos, debes de buscar acercarte a el y encontrar soluciones en conjunto. Nadie dice que es algo fácil, pero, debe hacerse el intento con buena voluntad, con hechos y no palabras. Recordemos que “No hay camino hacia la paz; la paz es el camino” Mahatma Ghandi.
*Abogado, Master en Tributación Internacional y Asesoría Jurídica de Empresas