Edificios de condominios y hoteles en el Sur de la Florida se están hundiendo a un ritmo inesperado, según un estudio reciente de la Universidad de Miami.
Entre 2016 y 2023, al menos 35 edificios en la franja costera desde el norte de Miami Beach hasta Sunny Isles han experimentado hundimientos de 2 a 8 centímetros (0,8 a 3 pulgadas).
Es normal que los edificios se hundan unos cuantos centímetros durante y poco después de la construcción. Pero en el caso de muchos de estos inmuebles, el hundimiento ha seguido ocurriendo años después de su erección y no se ha detenido.
Aunque las cifras del hundimiento pueden parecer poco alarmantes, no hay que descuidarse: representan una advertencia crucial sobre los riesgos que enfrenta el Sur de la Florida por el cambio climático, y también por las características geológicas de la región y la urbanización excesiva.
Entre los edificios donde ha habido hundimientos están inmuebles suntuosos como la Porsche Design Tower, The Ritz-Carlton Residences, las Surf Club Towers, el Faena Hotel, Trump Tower III y Trump International Beach Resort. Estos dos últimos llevan el nombre del ex presidente y ahora presidente electo Donald Trump, un negacionista del cambio climático.
La Florida ha sido, durante mucho tiempo, un imán para los que sueñan con una vida cerca de la playa, en un clima cálido y soleado. Pero detrás de esta fachada idílica, o más bien debajo, hay un terreno frágil que está sufriendo los embates de una combinación peligrosa de factores naturales y humanos. La superficie de la región se alza sobre una base de roca caliza, una roca porosa que es susceptible a la erosión, y que además permite que el agua subterránea salada invada el subsuelo a medida que el nivel del mar sube. Esta circunstancia agrava el riesgo de subsidencia (hundimiento del terreno) y puede afectar la estabilidad estructural de los edificios.
Además, el ritmo acelerado del cambio climático y la subida del nivel del mar, consecuencia de la continua emisión de gases de efecto invernadero, amenazan las costas. En el Sur de la Florida, el nivel del mar ha aumentado más de 20 centímetros (8 pulgadas) desde 1950 y se teme que este ritmo se acelere en las próximas décadas. El fenómeno aumenta la intrusión de agua salada y la magnitud y frecuencia de las inundaciones. Puede poner en peligro la infraestructura urbana al afectar los cimientos de los edificios y las carreteras.
Los hundimientos detectados también están vinculados a la actividad humana. La urbanización intensa, combinada con la extracción de agua subterránea, contribuye al hundimiento del terreno. Cada nuevo edificio que se construye aumenta la presión sobre un suelo que ya está afectado. Al mismo tiempo, la pérdida de humedales, que sirven como barreras naturales de protección a la incursión de las aguas marinas, agrava las inundaciones costeras.
¿Qué hacer? Los datos del hundimiento de edificios costeros indican que hay que tomar medidas sin más dilaciones. Es crucial implementar sistemas de monitoreo continuo para identificar áreas donde el hundimiento esté ocurriendo más rápidamente. También es esencial actualizar los códigos de construcción para exigir diseños que tengan en cuenta los riesgos del cambio climático y la subsidencia. Igual de importante, se necesita un compromiso político serio para mitigar los impactos del cambio climático, incluyendo medidas de adaptación como la elevación de infraestructuras, la colocación de barreras contra inundaciones en los puntos vulnerables, y la restauración de humedales.
Frente al cambio climático y la subida del nivel del mar, el Sur de la Florida está en una carrera contra reloj. Si no se toman medidas oportunas, los hundimientos actuales podrían ser el preludio de una crisis mayor. La amenaza señalada por los científicos debe enfrentarse con la urgencia que merece. [FIRMAS PRESS]
Andrés Hernández Alende es un escritor y periodista radicado en Miami. Sus novelas más recientes son El ocaso yLa espada macedonia, publicadas por Mundiediciones. También ha publicado el ensayo Biden y el legado de Trump con Mundiediciones.