“El amor es más fuerte que el odio”, reza un dicho popular. El amor es la virtud más bella, más sublime, más candorosa del alma, del espíritu y del corazón.
Amor no es más que cariño, amistad, ternura, simpatía, afecto, adoración, veneración, pasión, éxtasis.
La poetisa y religiosa Santa Teresa de Jesús, en su bello poema “Te diré lo que es amor”, dice “Cuando el amor está obrando lo que tiene obligación:/ si flaquea, si se cansa,/si desmaya… no es amor”.
“Cuando el amor está orando,/con amorosa atención:/si decae, si se entibia,/si se inquieta… no es amor”.
“El amor, el respeto y la comprensión son valores que constituyen una familia”.
”Nuestro hogar es el lugar donde crecemos juntos; en él deber reinar el amor, esa virtud hermosa que nos mantiene unidos, en una unión hermosa, sublime y candorosa”.
”En el hogar aprendemos a valorar a los demás y nos valoramos a nosotros mismos, a distinguir lo bueno y lo malo, lo lindo y lo feo. Un hogar es un lugar donde construimos nuestra identidad, sobre la base de normas como el amor, costumbres, ritos y valores de nuestros mayores. Es la primera escuela que nos enseña a convivir bajo normas de amor, de tolerancia y de respeto”. Del libro “Aprender a ser sociable”. Bogotá Colombia, Edición del año dos mil seis. ARQUETIPO GRUPO EDITORIAL.”.
Ahora veamos lo que ilustres pensadores dijeron acerca del amor:
Lope de Vega: “La raíz de todas las pasiones es el amor; de él nace la tristeza, el gozo, la alegría y la desesperación”.
Luis XII: “El amor es el rey de los jóvenes y el tirano de los viejos”.
Paul de Rock: “A los dieciocho años se adora; a los veinte se ama; a los treinta y seis se desea: y a los cuarenta se reflexiona”.
Pedro Gassendi: “El corazón de la mujer no envejece nunca; cuando cesa de amar es que ha cesado de latir”.
Platón: “La inquietud, el pesar, un cuidado extremo en el vestido.
La avidez, la pereza y la injusticia, tales son los desórdenes que acompañan de continuo al amor”.
Racine: “No es el amor un fuego que se pueda ocultar en un alma; es el que lo siente, lo descubre en su voz, en sus ojos y hasta en su silencio”.
Bretón de los Herreros: “Amor, he aquí la única manera de escribir mundo con sólo cuatro letras”.
Marcel Proust: “La vida está sembrada de milagros, aquellos milagros que pueden esperar siempre las personas que amen”.
Cervantes: “Dos cosas solas incitan a amar más que otras, que son la mucha hermosura y la buena fama”.
Madame Pompadour: “El amor es la pasión de las almas grandes y les hace merecer la gloria, cuando no les trastorna la cabeza”.
La salud mental
El sábado 14 de septiembre de 2024 el DIARIO DE HOY publicó en la portada el titular “El 20% de la población padece problemas de salud mental”.
“Especialistas en Psicología indican que dos de cada diez personas padecen problemas como ansiedad y depresión, aunque muchas no están diagnosticadas”.
“Depresión, ansiedad y traumas de la infancia son los problemas atendidos con mayor frecuencia, declaró el doctor en Psicología Óscar Aldana”.
Cuatro años después de haber superado la pandemia por Covid 19, especialistas en Psicología afirman con preocupación, que sus preocupaciones en salud mental continúan siendo notorios y poco atendidas por las instituciones públicas”.
“La cifra normal es que un 8% de la población general de un país, ahora con la pandemia, esta cifra podría incrementarse hasta un 20%, si no es que más población quedó afectada, sostiene el doctor en Psicología Óscar Orellana”.
“Datos recolectados a través de la Octava Encuesta de Humor Social y Político dicen que hay “Otros problemas de mayor importancia.”, del Centro de Estudios Ciudadanos (CEC) de las Universidad Francisco Gavidia presentada en julio de este año , incluyeron una parte de preguntas relacionadas con Psicología, donde resultó que un 19,6% de la población con mayoría de edad reconoce que tenía o tiene miedo a uno de sus padres”.
Cuando este que escribe la presente nota estudiaba Psicología en la Universidad de El Salvador, el catedrático de Psiquiatría nos decía que generalmente los pacientes con problemas emocionales presentan una baja autoestima, sentimientos de inferioridad, miedos infundados, depresión, ansiedad, fobias y hasta pensamientos de quitarse la vida.
“Estos pacientes –sostenía el catedrático- ameritan de un tratamiento psicológico; pero la mayoría de ellos se niega porque dicen que no están locos”.
“Generalmente los trastornos de la mente no son hereditarios, se adquieren por malos tratos de los padres, que azotan a sus hijos, como castigos, que les dicen frases hirientes a su dignidad; en fin, son padres crueles, que en verdad son ellos los que ameritan tratamiento psicológico”, sostenía el catedrático.
“Toda persona necesita ser respetada, tratada con comprensión, con dignidad. Y desde niño, principalmente, el ser humano amerita de cariño, de amor y de todo aquello que estimule el desarrollo de su personalidad”, agregaba el catedrático. Y afirmaba que “Un niño bien tratado, es muy difícil que cuando adulto sufra problemas de salud mental”.
Maestro, sicólogo, gramático.