La CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe) advierte que -en unos pocos años- androides (robots humanoides de la inteligencia artificial) sustituirán el 70 % de los empleos en América Latina. Nos enfrentamos así a una crisis social y laboral ante las máquinas inteligentes. Unas, sustituyendo al ser humano en diversos trabajos, oficios y maestrías; otras, desplazando a la mujer en actividades íntimas como lo es la robot femenina que hace felaciones y cuyo creador le llama “el sueño robótico” para hombres solos, vírgenes o fetichistas. Este fenómeno “amoroso” dio inicio con las bellas mujeres artificiales -y de todas las razas- que se ofrecen las tiendas de artículos íntimos sexuales. Pero lo más peligroso de las máquinas desplazando al humano, es que muchas (drones) ya están siendo utilizadas para el holocausto de la guerra ya que –desde un ordenador—sólo se programa el lugar y a la persona a quien van a atacar o eliminar. Estamos pues ante la barbarie tecnológica de la inteligencia artificial, que bien puede ser útil y ayudar a la Humanidad o convertirse en un fatídico sustituto laboral o en una maquinaria asesina. La civilización actual está en una peligrosa encrucijada: salvarse o caer; ya que las máquinas inteligentes pueden volverse en contra de su propio creador, como ocurre en la leyenda del monstruo de Frankenstein del cine de ficción. <palabrasbalaguer.facebook.com>
Robots humanoides desplazando al humano
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