En la mitología nórdica Hugin y Munin, eran un par de cuervos del dios Odín. Estos viajaban alrededor del mundo recogiendo noticias para Odín. Hugin era el “pensamiento” y Munin la “memoria”. Ambos eran enviados al alba a recoger información y regresaban por la tarde. Tal vez los cuervos sepan más que nosotros sobre la reciente tragedia sirio-turca. Millares de cuervos sobrevolaron e invadieron la ciudad turca -gritando alarmados- minutos antes que se produjera el mortal terremoto de magnitud 7,8 del 6-2-2023. Mismo que ha dejado millares de víctimas y devastado gran parte de las ciudades. El vuelo de los cuervos agoreros aparenta el presagio de la desgracia que se avecinaba sobre el sureste de Turquía y el norte de Siria. Expertos del instinto animal señalan que éstos pueden percibir antes que nosotros los desastres naturales. (Se comprobó en los tsunamis ocurridos en algunas partes del mundo, cuando los elefantes huyeron a las partes altas, antes de que se produjeran). Los estudios afirman la natural capacidad de predicción animal ya que tienen sentidos aumentados -desconocidos por nosotros- que les permiten percibir lo que no podemos los seres humanos como lo son las emisiones ultrasónicas. Ponen por ejemplo a los perros que usan para detectar explosivos y drogas, capacidad de detección de la cual carecemos.
Millares de cuervos sobrevolaron Turquía antes del cataclismo
.