En enero se celebra el Mes al Adulto Mayor. Hoy en día con las redes sociales y los reels podemos ver desde otra óptica la vida cotidiana de los adultos mayores. De allí el título de esta columna. Pero además de ello, desde las redes sociales muchos demuestran la juventud que llevan dentro ese deseo de vivir como bien lo dice la actriz española Maruja Torres: “La vejez y la guerra pueden generar la misma sensación solo que a la guerra vas con la esperanza de regresar; en cuanto a la vejez, cada día que pasa sabes que no regresarás”.
Según la Coalición Nacional por la Dignidad de las personas mayores, en El Salvador se considera adulto mayor a todo hombre y mujer mayor de 60 años de edad, lo cual representa el 13% del total de la población salvadoreña. De este millón 200 mil adultos mayores solo 200.000 tienen pensión y el resto está desprotegido completamente.
Definitivamente el tema de las pensiones es un tema vital para la vejez, pero no es ese el punto de este artículo de igual forma las redes sociales nos dan a conocer la vida que se llevan en otros países.
En lo particular me gusta revisar lo que desean expresar los adultos mayores y definitivamente la calidad de vida se puede ver desde muchos ámbitos tanto así que dentro del índice de desarrollo humano el indicador de esperanza de vida al nacer se sigue utilizando, cuando realmente también se debería de evaluar la calidad de vida que las sociedades ofrecen después de superada la esperanza de vida.
Hablar de calidad de vida en el adulto mayor puede ser un concepto tan amplio desde la responsabilidad de las siguientes generaciones y no abandonarlos hasta llegar al punto que los asilos sean una opción y no un terror al llegar a esa edad, dejarlos ser libres cuando aún pueden hacerlo, ser independientes, disfrutar en medio de sus posibilidades y sus habilidades y sus destrezas, calidad de vida en el transporte terrestre, lugares de ocio, calles adecuadas y una población en general consciente y educada en saber dar el paso y prioridad a los adultos mayores servicios de salud básicos y accesibles en fin todos los indicadores necesarios para esa deseada calidad de vida de los adultos mayores.
No hablaré de historia, pero basta con ver el papel y rol en las sociedades antiguas cual era el trato y rango que se les daba en la cultura maya, azteca, inca, la cultura asiática como la japonesa, la china, la hindú, en África, los egipcios; en Europa, los griegos. Para todas ellas, el valor de la sabiduría que daba la edad era vital y un denominador común. Las nuevas civilizaciones definitivamente los países más desarrollados con mejor producto interno bruto y con mejores índices de desarrollo humano dan la oportunidad a los adultos mayores a tener esa mejor calidad de vida al mayor número de personas.
No puedo negar mi respeto y admiración a Doña #Olga Miranda por llevar a la agenda nacional y visibilizar al adulto mayor de El Salvador. Para terminar busqué en la Biblia y consulté con personas que conocen el tema y encontré ocho versículos pero los dos que decidí mencionar son Job. 29:8: “Me veían los jóvenes y se escondían, y los ancianos se levantaban y permanecían en pie“. Y 1 Pedro 5:5: “Asimismo, vosotros los más jóvenes, estad sujetos a los mayores; y todos revestíos de humildad en vuestro trato mutuo, porque DIOS resiste a los soberbios, pero da gracias a los humildes”.
A todos los salvadoreños de mi generación solo puedo decir esta frase: No le tengamos miedo a la vejez, pero sí tengámosle miedo a la vejez desprotegida.
Médico.