Por Ciudadano Bukele:
Estoy tratando de descifrar el mensaje que nos quiso mandar al poner en la noche del pasado jueves 7 de marzo en Twitter la frase: “A new Rome must be built.” Hay que construir una nueva Roma.
Como lo pone en inglés, obviamente no es dirigido a los salvadoreños. Es un mensaje al mundo, escrito por alguien que tiene ambiciones de liderazgo que trascienden las fronteras de su pequeño país. Un mensaje de alguien que tiene ratos de tratar de decir al mundo que necesita nuevo liderazgo y nueva visión. En este sentido, “Hay que construir una nueva Roma” significa: un nuevo centro del poder. Y por más absurdo y soberbio que sea, significa: Este centro del poder será la nueva El Salvador, que está construyendo Nayib Bukele.
Significa que nuestro cacique local tiene alucinaciones y ambiciones de grandeza que a lo mejor requieren urgentemente que reciba ayuda profesional.
Ya le quedan chiquitas las visiones de BitcoinCity o Surf City, tiene que ser Roma, la ciudad eterna, el centro del mundo, desde el cual se gobernaba un reino que abarcaba casi la totalidad del mundo conocido.
“Roma no fue construida en un día.”
¿Conoce este dicho? Nadie sabe quien lo inventó, pero todos sabemos lo que significa: Para hacer algo importante, no valen la improvisación, los caprichos, las ocurrencias de un gobernante - tiene que ser resultado de paciencia, planificación, coordinación y sabiduría.
Usted, ciudadano Bukele, no va a construir ninguna Roma. Usted no va a construir nada importante que perdure, porque por más que se ponga el título de ‘philosopher king’ en su perfil en Twitter, usted actúa no por sabiduría, sino por impulso; no planifica, sino inventa e improvisa; no tiene visión del futuro, sino ocurrencias.
“Todos los caminos conducen a Roma.”
Este otro dicho significa: No hay una manera de hacer las cosas. Siempre hay varias. Y quien en su soberbia piensa que la suya es la única solución para resolver un problema o para llegar a una meta, está equivocado. Es más, es un obstáculo. Usted, con su soberbia sin límites, nunca va a llegar a Roma, mucho menos construir una nueva Roma.
Rómulo y Remo
Roma fue fundada por estos dos gemelos, descendientes de Eneas, quien combatió en la batalla de Troya. Según la leyenda romana fueron amamantados por la loba Luperca, hasta hoy el símbolo de la ciudad de Roma. La madre de los gemelos, la sacerdotisa Rea Silvia, quedó embarazada del dios Marte. Un pecado que le valió que su padre, el rey Amulio de Alba Longa, condenara a la muerte a ella y sus hijos gemelos. Para salvar a los niños, la madre los puso a flotar en el rio Tíber, en una cesta. Los recogió la loba Luperca. En el lugar donde los había llevado el Tíber, luego los gemelos fundaron una ciudad. Después de que se enemistaran y Rómulo asesinara a su hermano Remo, puse su propio nombre a la ciudad: Roma.
En los sueños enfermizos de Nayib Bukele de construir una nueva Roma, ¿quién será quién? ¿Quién es Rómulo, el primer rey de Roma, y quién es Remo, el sacrificado? La pesadilla que enfrentamos es que estamos gobernados por un hombre que sueña con quedarse con el poder para construir una nueva Roma. Todo lo que hará como gobernante, lo hará en función de su sueño de grandeza.
Al fin, nada es real, todo es pura fantasía suya. Esto es precisamente la pesadilla: un presidente delirando.
Sin más que agregar, Paolo Luers