Carlos Hermann:
Me mandaste vía Twitter lo que llamas “preguntas al alemán que hace preguntas en un diario”. Una mezcolanza de preguntas, mentiras e insultos. Repoduzco aquí solo las preguntas. Como no soy como ustedes, las voy a contestar. Las difamaciones no merecen respuesta.
- Cómo llegó a El Salvador?
En Aeronica.
-¿Cuándo llegó?
El 10 de enero 1981.
-¿Con quién se puso a trabajar?
Con mi periódico TAZ y con el ERP. Todo está contado ampliamente en mi libro Doble Cara.
-¿Era parte de la guerrilla?
Sí.
-¿Fue a conseguir financiamiento para su “justa y noble” causa armada?
Sí. Organicé con el periódico alemán TAZ la campaña ‘Armas para El Salvador’, que recaudó más de 4.7 millones marcos alemanes (casi 3.3 millones dólares) para el FMLN.
-¿Embaucó a una señora adinerada que donó una considerable suma de la cual nunca le rindió cuentas y que no fue a parar a los pobres guerrilleros, sino a su cuenta bancaria, en Nueva York?
No existe ninguna señora adinerada “embaucada”. Sobre los fondos recaudados en la campaña ‘Armas para El Salvador’, la dirección de la TAZ llevó registros contables. Fueron enteramente entregados a la Comandancia General del FMLN. Nunca tuve una cuenta bancaria en Estados Unidos.
-¿Qué arma empuñó usted cuando vino supuestamente a cubrir la guerra como periodista, usan armas los periodistas o era usted militar o solo un mercenario?
Cuando vine en 1981, mis únicas armas fueron mi cámara y el teletipo. En los años que pasé en Morazán, me dieron un fusil. Todos tenían que estar en condición de defenderse.
-Cuántas vidas de salvadoreños se cobró?
-Ninguna. Acompañé a las undades guerrillas, pero para hacer fotos o videos. Nunca tuve que usar el arma contra nadie.
-¿Cuándo fue contratado a pasarse del lado de la oligarquía?
Nunca. Luego de la guerra dejé la militancia y nunca agarré otra. Regresé al periodismo independiente.
-Una vez terminada la guerra ¿con qué capital montó una empresa de producción publicitaria?
Con fondos recaudados en EE.UU. para este fin, para dotar a la izquierda de un medio de comunicación a su ingreso a la política legal.
-¿Es cierto que sustrajo dineros de esa empresa sin consultar a sus socios y con eso abrió un bar donde por cierto se veía entrar y salir a personajes del partido Arena vinculados ¡si! también a los escuadrones del mayor?
Ni un centavo. La Ventana la abrimos con una herencia, que me dejó mi madre. La Ventana era un lugar abierto para todos. Nuestro parroquiano más derechista fuiste vos, con tus odiosos discursos de apología al general Pinochet y su sangriento golpe de Estado.
-¿Qué hay de las planillas del Seguro Social que nunca pagó a sus empleados de ese bar? Todas las planillas del Seguro Social fueron enteramente pagadas.
-¿Cuánta fue la suma que finalmente pagó como intermediario de sus nuevos jefes de la derecha ante las pandillas del crimen organizado para conseguir votos a base de extorsionar salvadoreños para unas elecciones?
$0.00.
-¿Cómo va ese juicio por cierto? Se supone que tiene restricción migratoria de salida, pero hay informes de que usted salió sin autorización de manera clandestina e ilegal por la frontera terrestre…¿Es así? ¿Podría usted confirmar?
Lo puedes leer en el último capítulo de mi libro Doble Cara.
-¿Vendía usted las drogas que también consumía, a los jóvenes de la colonia donde tenía su bar?
Jamás consumí ni vendí otras drogas que cerveza, vinos y licores.
¿Fue La Ventana un centro de operaciones de Arena?
Si pensabas este ¿entonces, qué hacías vos ahí? ¿Qué hacían en La Ventana los ex guerrilleros, los periodistas, los fundadores del Faro, los sindicalistas, los artistas?
-Trabaja para un matutino que por cierto uno de sus propietarios se vincula como financista a escuadrones de D’Abuisson, ¿es eso así, verdad?
-No me consta. ¿Y qué hacías tú trabajando en EDH cuando todavía fue dirigido por don Enrique Altamirano? Yo comencé a escribir para El Diario de Hoy, cuando el nuevo director me invitó a formar parte del proceso de convertirlo en un medio plural y democrático.
Contesto estas preguntas por respeto a los lectores y al principio de la transparencia, no por respeto a ti. No te tengo respeto.
Dos preguntas a vos: ¿Cuánto ganaste en la piñata de la Asamblea cian? ¿Cuánto te pagan ahora como empleado de la Asamblea?
Sin saludos, Paolo Luers
Posdata: Quien quiere leer el texto completo de Bruch, con todas sus mentiras, puede encontrarlo en este link de Twitter.