Para cuatro de cada diez micro y pequeños empresarios salvadoreños, los altos precios de las mercaderías y materias primas, así como la disminución en las ventas (para tres de cada diez) les han afectado en sus negocios en el primer trimestre de 2024.
Así lo refleja un estudio reciente de la Fundación Salvadoreña de Apoyo Integral (FUSAI), divulgado a través del Observatorio Mype (Micro y pequeña empresa).
El informe sobre el Índice de Confianza Empresarial para el primer trimestre 2024 indica que “los precios de compra de mercadería y materia prima aumentaron para un 39.6 por ciento de los empresarios”, quienes señalan que el alza fue de 1.5 por ciento más que el trimestre anterior.
De acuerdo a los empresarios consultados, la inflación es el problema más importante al que se enfrentan sus negocios.
Datos del Banco Central de Reserva (BCR) indican que la inflación fue del 1.14% en abril, reflejando un alza respecto a febrero (0.8%) y marzo (0.7%).
Según el presidente del BCR, Douglas Rodríguez, El Salvador es “el segundo país en Latinoamérica con la inflación más baja”, ya que la tasa promedio de la región es de 3.3%.
Sin embargo, los salvadoreños han seguido experimentando altos costos de los productos, sobre todo en el rubro de alimentos y bebidas.
De hecho, de los 12 rubros que componen el Índice de Precios al Consumidor (IPC), el de restaurantes y hoteles (5.54%), así como el de alimentos (2.34%) son de los más elevados hasta abril.
Pero el estudio del Observatorio Mype también plantea otros desafíos que han enfrentado los micro y pequeños empresarios en los primeros tres meses del año en curso.
“El aumento de la competencia y una disminución en la demanda fueron citados como principales inhibidores por un considerable número de empresarios”, dice en el documento.
Un 45% de los consultados expresan que resienten un aumento de la competencia en sus negocios. En el primer trimestre de 2023 el porcentaje que consideraba ese como un factor que les afectaba fue del 49% y en el trimestre anterior, es decir el último del año pasado, fue el 44%.
Mientras que el 32% de los micro y pequeños empresarios considera que hubo una disminución en la demanda de sus productos y servicios entre enero y marzo pasados.
En el primer trimestre de 2023 opinó así el 33% de los consultados, pero el último trimestre del año anterior fue el 30%, lo que implica que más personas han resentido las bajas ventas en sus comercios.
Y también hubo un 22% que identificó la escasez de mercadería como un desafío en el periodo evaluado.
Este dato podría estar relacionado con los altos precios de materias primas, lo que provocaría que no las traigan al país.
A eso se le suma que un 31% de los empresarios reportaron dificultades para acceder a financiamiento (1% más que el trimestre anterior), lo que podría obstaculizar la expansión y el crecimiento futuro de sus negocios, dice en el informe.
Y aunque el porcentaje es menor a los demás factores, el 11% expresó que resultó afectado por disposiciones municipales y de gobierno para operar, lo que representó un 4% más que el período anterior.
Mientras que solo el 2% de los consultados indicó que le afectó la delincuencia, que fue el 1% más respecto a los últimos tres meses de 2023.
Debido a todos los factores anteriores, muchos micro y pequeños negocios afirmaron que no lograron contratar más personal y tampoco invertir más en sus comercios, como hubieran deseado.
Según los datos del estudio, el 22.1% de empresarios contrató más empleados pero fue un 3.1% menos que el trimestre anterior, es decir al final de 2023.
De igual forma, el 25.8% manifestó que invirtió más en sus negocios, pero fue un 5.1 % menos que en el trimestre pasado (entre octubre y diciembre).
Las expectativas para el segundo semestre de 2024
A pesar de las dificultades que han pasado en los primeros tres meses de este año, los micro y pequeños empresarios no pierden las esperanzas de que este próximo trimestre la situación mejore.
Según indica FUSAI en el informe, al menos 6 de cada diez empresarios tienen expectativas favorables para el siguiente trimestre, pues el porcentaje subió un 8.4% respecto a los tres meses previos.
“Al consultar sobre cómo esperan el desempeño de sus negocios en los próximos tres meses, el porcentaje de empresarios con expectativas favorables creció de 52.6% a 61% en este cierre de marzo 2024”, explica la entidad.
Mientras que el porcentaje de los empresarios con expectativa desfavorable disminuyeron al pasar de 8.6% a 5.5%, añade.
Asimismo, la entidad mide en cada trimestre la confianza que tienen los empresarios en la economía para invertir.
“Este año se destaca por un buen comienzo de período en la confianza de los empresarios MYPE. Si el último trimestre del año pasado estuvo impulsado por la situación de los negocios, este primer periodo 2024 se caracteriza por un prolongado efecto del cierre de año anterior y el crecimiento en las expectativas para el siguiente trimestre”, dice.
De acuerdo a la medición que hace la entidad, al cierre del primer trimestre de 2024, el indicador alcanzó 39.7, la puntuación más alta registrada hasta la fecha.
“Este puntaje indica un momento de optimismo en la economía, con empresarios que anticipan un entorno económico favorable y un clima propicio para la inversión, el aumento en la producción y el empleo, previendo que sus inversiones serán rentables”, explica.
El Índice de Confianza Empresarial creció significativamente a marzo (105.8 puntos), siendo las pequeñas empresas las que han liderado este crecimiento, así como los negocios de subsistencia, destaca.