La Comisión Europea quiere poner fin a los altos precios de la electricidad que se han registrado en los últimos meses. Para ello, apoya una reforma en que las energías renovables sean las que sobre todo generen la electricidad de hogares y empresas y no el gas, como hasta ahora.
Objetivo 70%
Bruselas propone incentivar el despliegue de las energías renovables, para que el 70% de la electricidad en toda la Unión Europea provengan de este tipo de energía, entre las que se encuentra la eólica o solar, pero también la nuclear, tal y como pedía Francia.
En su propuesta también pide que haya contratos a largo plazo en los que los precios dependan menos de la volatilidad de los mercados. Se hará a través de acuerdos entre los Estados y las empresas en los que se fijará un precio previamente acordado.En caso de una crisis de precios como la actual, la Comisión también incentiva que los Estados compartan electricidad si hay escasez y que se ayude a los hogares vulnerables si no pueden pagar las facturas.
Dentro de un año la reforma del mercado eléctrico es uno de los grandes cambios que se pedían en la Unión Europea, especialmente desde la invasión de Rusia de Ucrania, cuando Moscú distorsionó los mercados del gas para hacer aumentar los precios de forma artificial.
"El diseño actual (...) ha proporcionado un mercado eficiente y bien integrado durante muchas décadas, pero las estrecheces globales de suministro y la manipulación de Rusia de nuestros mercados energéticos ha hecho que muchos consumidores afronten incrementos masivos en sus facturas", resumió en rueda de prensa la comisaria europea de Energía, Kadri Simson.
La Comisión tendrá ahora que negociar la versión final con los Estados miembros y con el Parlamento Europeo. Espera que el nuevo mercado esté operativo en un año, aunque Alemania aboga por un ligero ajuste ahora y una reforma más profunda con más tiempo.