Los estragos de la tormenta Julia sobre la producción agrícola nacional no pudieron llegar en peor momento. En medio de un alza generalizada de precios en granos básicos y otros productos necesarios en la alimentación de los salvadoreños debido a la inflación, las lluvias arruinaron más de 13,514 manzanas de cultivos de granos básicos como el maíz, el frijol y el arroz, según datos combinados entre el ministerio de Agricultura y la Cámara Salvadoreña de Pequeños y medianos productores agropecuarios (Campo).
En datos preliminares el gobierno contabiliza al menos 10,292 manzanas de cultivos perdidas, siendo la zona oriental la más afectada.
De acuerdo al ministro Enrique Parada, esta pérdida representa un riesgo de más de 100,000 quintales de productos agrícolas que los salvadoreños consumen como parte de su canasta básica.
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Las pérdidas van desde maíz, frijol y arroz hasta hortalizas, frutas y semilla certificada para sembrar y café.
Solo en la producción de maíz se estima que se han perdido 133 manzanas en el oriente del país. En San Miguel se contabilizan 30 manzanas afectadas por los vientos, en Morazán otras 8 manzanas y en La Unión, 95 manzanas, siendo esta la zona más dañada por la tormenta.
Parada también dijo que en Usulután se perdieron totalmente 30 manzanas en de cultivo de semilla certificada por el exceso de humedad.
Pero por su parte, la asociación Campo señala que solo en maíz y frijol se han perdido 12,894 manzanas de estos granos básicos en todo el país que representan una pérdida de 595,995 quintales de estos granos.
Además, el ministerio de Agricultura cuenta 400 manzanas de arroz dañadas en Zapotitán, al occidente del país y otras 220 manzanas afectadas en La Libertad en hortalizas y verduras como el chile verde, cebolla y tomate.
Respecto al café, según datos del MAG en coordinación con la Asociación Cafetalera de El Salvador, se estima que se ha perdido un 5% de la producción nacional y también está en riesgo otra buena parte debido a que las plantas están propensas a contagiarse con el hongo de la roya.
En Chalatenango, donde se produce gran parte de hortalizas y verduras, solo ha reportado daños en infraestructura como los invernaderos y calles de acceso, según dijo Parada.
En el sector ganadero no se reportan pérdidas, excepto animales criados en casa y cuya producción de lácteos o carne es para consumo familiar.
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La cantidad de manzanas de cultivos perdidas son un número preliminar y podrían aumentar en la medida que los dueños de las parcelas confirmen en los próximos días si han podido recuperar sus siembras o si estas están totalmente dañadas.
En el caso del frijol, el MAG no reportaba daños ayer por la mañana. Según Parada, dado que esta siembra todavía está en etapa fenológica, es decir que la planta todavía está formando las vainas, muchas áreas han sobrevivido a la lluvia y los fuertes vientos, pero corren el peligro de llenarse de hongos si no se aplican fungicidas lo antes posible.
Sin embargo Campo sí reportó daños sobre todo en la región de Santa Ana, Ahuachapán y Sonsonate.
Y aunque en términos de hortalizas, frutas y verduras, El Salvador importa todos estos productos desde Guatemala, el panorama sigue siendo negativo pues el país vecino también se ha visto afectado por las inundaciones que ha causado la tormenta Julia. Lo mismo ocurre con Honduras, de donde se importa gran cantidad de productos alimenticios básicos para el consumo de las familias salvadoreñas.
El ministerio de Agricultura aseguró que implementará un plan para reponer la producción nacional afectada por Julia, en diferentes zonas agrícolas. "Este trabajo se realizará de forma coordinada con los sectores involucrados, a fin de brindar soluciones oportunas", compartieron en sus redes sociales.
Inflación
Las afectaciones por las lluvias podrían encarecer aún más los alimentos para los salvadoreños.
Esta semana El Diario de Hoy reportó que la canasta básica alimentaria para el sector urbano llegó a los $238.95, lo que significa que, entre enero y agosto del año en curso, aumentó en más de $25, o casi un 12%, pues a principios de 2022 la misma estaba calculada en $213.43.
Mientras, la canasta básica rural ha tenido un aumento del 14.2% en lo que va del año pues en enero tenía un costo de $157.13 y en agosto subió a $179.47, según la información de la Digestyc.
Productos básicos como el frijol, de hecho, ya aumentaron de precio. El frijol de seda cultivado en el país ya alcanzó los $90 por quintal y este precio se cotizaba antes de que las lluvias de la tormenta Julia afectaran los cultivos.