En dieciocho meses, desde enero de 2021 hasta junio de 2022, el precio de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) ha incrementado de manera significativa, lo que ha provocado que los salvadoreños paguen más por los alimentos que consumen en su núcleo familiar, algo que está vinculado de forma directa con el alto nivel de inflación que atraviesa el país, la cual ya alcanzó el 7.8%, según el Banco Central de Reserva.
Ese aumento desmedido demuestra que el incremento del índice de inflación no ha subido en paralelo con el precio de la canasta básica, pues según datos que brindó el director ejecutivo del Centro para la Defensa del Consumidor (CDC), Danilo Pérez, durante una entrevista en Canal 21, la canasta básica del sector urbano ha incrementado en 18.1% y la del sector rural hasta en 22.6%.
Puede interesarle: A once meses desde la primera compra, Gobierno no recupera lo gastado en Bitcoin
Estos porcentajes se traducen en un alza de $36.23 para el caso de la canasta urbana, pues esta pasó de costar $199.24 en enero de 2021 a $235.47 en junio de 2022, según los datos oficiales de la Dirección General de Estadísticas y Censos (Digestyc), retomados por el CDC.
Por el otro lado, la canasta básica rural pasó de valer $141.68 en enero de 2021 a valer $173.74 en junio de este año.
Con estos valores, el precio de la CBA alcanza un máximo histórico en los últimos 20 años, pues entre 2001 y 2022, el precio nunca había superado los $230 para el sector urbano o los $160 para el sector rural.
En este sentido, Pérez señala que esta alza significativa afecta directamente el bolsillo de las familias salvadoreñas, a la vez que apunta que mientras los costos han subido, el poder adquisitivo ha disminuido, es decir, la capacidad de poder gastar en adquirir estos productos.
En este caso, el titular del CDC agrega que el salario mínimo, que experimentó un aumento en agosto de 2021, no ha sido suficiente para compensar la subida de precios de los alimentos, pues luego de los descuentos de ley, un empleado con salario mínimo en el sector comercio percibe un sueldo neto mensual de alrededor de $327, es decir, solo $92 por encima del costo de la CBA.
Ante esto, Pérez destaca que los salvadoreños no solo pagan el costo de la canasta básica, sino que también enfrentan otro tipo de gastos, tales como servicios o educación de sus hijos, algo que complica más la situación económica.
“El dinero, sencillamente, no alcanza para cubrir todas las necesidades”, señala el director ejecutivo del CDC, quien añade que “por esta razón es que las personas se van del país, pues la migración tiene múltiples causas, pero la principal es la económica”.
Algunos de los productos que más subieron de precio son los huevos, que pasaron de costar $2.50 el cartón en mayo de 2021, a valer $4.50 en julio de 2022.
Asimismo, el aceite en presentación de 443 ml pasó de un costo de $0.77 en el mismo mes de 2021 a $1.16 en julio de este año, mientras que el frijol rojo de seda pasó de $56.40 el quintal, en mayo de 2021, a un valor de $86.30 en julio de 2022.
Por otro lado, el precio de la manteca vegetal, utilizada en la elaboración de pan francés y pan dulce, ha tenido también un fuerte aumento, según Pérez, pues de costar $26 la caja de 50 libras en mayo del año pasado, pasó a costar más del doble, es decir, $55.50.
Además: Precio de la canasta básica aumentó más de $36 en un año y medio
“Comer huevos es un lujo”
Para los comerciantes y consumidores de los productos de la canasta básica, en el centro de San Salvador, el aumento es una realidad con la que deben lidiar a diario pues los que se dedican a vender se han visto obligados a subir los precios, tal como lo indica Ismael Duarte, quien es comerciante en el Mercado Central.
Según Duarte, productos como los aceites son los que más han incrementado de precio, llegando incluso a valer el doble de lo que valían el año pasado, algo que se puede verificar en los datos del CDC.
Por su parte, Liz Coto, quien es ama de casa y realiza sus compras en el mismo mercado, advierte que ella prefiere adquirir los productos de la canasta básica en ese tipo de establecimientos pues, pese al alza, le resulta más barato que hacerlo en supermercados.
Además, añade que son precisamente los aceites los que mas han aumentado. “Lo que siento que más ha subido son los aceites y los víveres, pues antes compraba la libra de frijoles a $0.80 y ahora vale $1.20 (…) es un alza que debemos agregar a nuestro presupuesto”, apunta.
Asimismo, señala que “comer huevos ahora es un lujo”, debido a que este producto también ha sido uno de los que más han subido de precio en los últimos meses, los cuales se suman a los productos cárnicos y lácteos que también han experimentado alzas.