La central hidroeléctrica de Guajoyo ha inyectado energía de forma marginal en los últimos meses de este año, según se desprende de las estadísticas de la Unidad de Transacciones (UT), entidad responsable de la operación del sistema de transmisión, asegurar la calidad del suministro y administrar el mercado mayorista de electricidad.
Esto en un contexto de altos precios de la energía eléctrica, lo que ha provocado que, en el mercado, se diera un aumento del 9 % de la tarifa para este trimestre. Este, sin embargo, será absorbido por los impuestos de los salvadoreños gracias a un subsidio aprobado por la Asamblea Legislativa este 24 de octubre.
La planta, ubicada en Metapán, Santa Ana, tuvo un periodo de mantenimiento entre el 21 de mayo y el 27 de julio de 2023, por lo que cesó sus actividades.
Sin embargo, a pesar de que el embalse se ha mantenido en niveles superiores a los 422 metros por encima del nivel del mar, la central ha inyectado apenas 1.9 gigavatios/hora (GVH) en los dos meses posteriores (y los dos últimos consolidados para los que se cuenta con información disponible), llegando a su nivel más bajo en septiembre, con solo 0.1 GVH.
Esto contrasta con lo inyectado el año pasado, cuando en ese bimestre (agosto-septiembre) se alcanzaron 15.2 GVH, es decir, ocho veces más. La baja en la frecuencia de las lluvias, provocada por el fenómeno de El Niño, puede ser uno de los factores. Ya en agosto de este año, el sector energético estaba preocupado por el impacto del fenómeno climatológico en la generación de electricidad. La generación de la fuente hidroeléctrica pasó de 204 gigavatios/hora en 2022 a solo 68 en 2023.
Sin embargo, el porcentaje de caída de Guajoyo ha sido mucho mayor que el de otras hidroeléctricas, como por ejemplo la 15 de septiembre, que inyectó el año pasado 1.89 veces lo de 2023 entre agosto y septiembre.
Por otro lado, siempre tomando en cuenta los datos de la Unidad de Transacciones, esa última planta y todas las demás hidroeléctricas del país registraron sus mayores inyecciones del año en los dos últimos meses, sobre todo en septiembre.
Carlos Martínez, ingeniero docente y especialista en temas energéticos, ve una anomalía en la caída tan drástica de la inyección de Guajoyo, incluso si se toma en cuenta el histórico de años anteriores, algo que estudia con frecuencia con objetivos académicos.
“Es algo que deben explicar las autoridades, sobre todo porque sucede en un contexto de crisis en los precios. Echar a andar a toda su capacidad una planta como Guajoyo habría ayudado, quizá, a abaratar los costos”, comentó Martínez.
Crisis de energía en Centroamérica afectaría precios para consumidores
El ingeniero Javier González, gerente de Energía de la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI) y miembro de la junta directiva de la Unidad de Transacciones (UT), sostiene por su parte que dicha baja ha estado marcada por la falta de lluvias, aunque esto no ha afectado de forma pareja a todas las hidroeléctricas del país.
Afirma que este mes se ha registrado una recuperación y que todas las plantas han trabajado a capacidad máxima algunos días, como en el caso de Guajoyo, aunque solo en dos, el 5 y 9 de octubre.
“En octubre, Cerrón Grande alcanzó el nivel de embalse promedio de todos los años, a diferencia de la presa de Guajoyo”, matizó González, de la ASI.
El Diario de Hoy quiso obtener la versión de la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL), por lo que hizo llegar la consulta al departamento de Comunicaciones de la entidad. Hasta el cierre de esta nota, no hubo respuesta por parte de la institución.
La central hidroeléctrica de Guajoyo es la más pequeña del país y cuenta con una capacidad instalada de 15 megavatios, con un embalse con capacidad de mantener 645 millones de metros cúbicos de agua.
El embalse registró sus niveles más bajos del año en mayo, cuando bajó hasta los 419 metros sobre el nivel del mar, pero la central fue capaz de inyectar 3.6 gigavatios hora, a pesar de que solo estuvo activa durante 21 días debido al mantenimiento mayor y cambio de intercambiador de calor que tuvo en la unidad U1.
El nivel óptimo del embalse de Guajoyo es de 430 metros sobre el nivel del mar. Es posible, también, que las autoridades hayan decidido embalsar la represa para que lo alcance, algo que no le ha sido posible, por ejemplo, para hoy, por lo que la de Guajoyo tampoco inyectará energía eléctrica a la red nacional, según las programaciones publicadas ayer por la Unidad de Transacciones.
Altos costos en la 3 de Febrero (Chaparral)
Según datos de la Unidad de Transacciones, la recién inaugurada central hidroeléctrica 3 de Febrero aportará 66 megavatios a la capacidad instalada del país, por lo que cubrirá el 2.9 % de la generación total del país, que es de unos 2,251 megavatios.
Si bien la generación hidroeléctrica está considerada una de las más baratas en el mundo, lo cierto es que la corrupción ha hecho que se vuelva costosa en El Salvador. Según el Gobierno, el costo de la planta, que antes se llamaba El Chaparral, llegó a los $800 millones.
Eso hace que el costo promedio de cada megavatio aportado por la central hidroeléctrica 3 de Febrero sea de $12.12 millones.
Según el académico Carlos Martínez, hacer estos promedios es un procedimiento habitual para comparar el costo entre tecnologías y generación de energía.
“Siempre, las más caras han sido la geotérmica y la nuclear. La hidroeléctrica es una de las más baratas. Pero las realidades de nuestros país, con una clase política cleptocrática, causan estos excesos”, comentó Martínez.
La central fue inaugurada por el presidente de la República, Nayib Bukele, el 19 de octubre. Aseguró que era un “monumento a la transparencia”. Eso después de que en septiembre de 2019 aseguró que la dinamitaría por tratarse de uno de los símbolos de la corrupción de los gobiernos anteriores.
La construcción inició en 2008 bajo la dirección de la empresa italiana Astaldi, el proyecto avanzó pero se suspendió en 2010 luego de que la constructora alegara problemas de ubicación cerca de la zona donde se encontraba la planta.
La planta, si bien fue inaugurada este 19 de octubre, ha inyectado energía desde julio. Su aporte más importante fue en septiembre: inyectó 13.6 gigavatios hora, unas 130 veces más que Guajoyo.
