La urgencia de dinero cada vez aprieta más al gobierno. Y en vista que no logra financiamiento externo recurre constantemente a los inversionistas locales para que le presten más fondos, aunque tenga que pagar tasas de interés más altas.
En casi cinco meses, el Ministerio de Hacienda ha emitido deuda de corto plazo para pagarla en menos de un año, tanto en Letras del Tesoro (Letes) como en Certificados del Tesoro (Cetes), por más de $572.9 millones.
De esa cantidad, $510,290,600 son colocaciones de Letes entre enero y mayo de este año.
Solo el mes pasado el gobierno pidió créditos por $54.4 millones en Letes; una colocación fue el 12 de abril por $13.9 millones, y dos más el 25 de abril: una por casi $8.5 millones y la otra por más de $32.5 millones. Además, el pasado 19 de mayo realizó dos operaciones para colocar más Letes: una por $22.4 millones y otra por $5 millones.
También en abril Hacienda emitió un acuerdo para gestionar préstamos de corto plazo, a través de Cetes, por $67.7 millones, de los cuales hizo una colocación el 27 de ese mes por $62.6 millones, es decir que le quedan $5.1 millones pendientes de colocación.
El pasado 20 de abril, la cartera que dirige Alejandro Zelaya, autorizó las gestiones para la nueva emisión de certificados, lo cual seguió cargando la “tarjeta de crédito” del gobierno que al final es pagada por todos los salvadoreños.
“Autorizar la realización de gestiones para la obtención de un crédito de corto plazo, bajo condiciones favorables hasta por un monto de $67,700,000, mediante la utilización de un instrumento de financiamiento denominado Certificados del Tesoro, el cual en la práctica ha sido un instrumento eficiente y útil para obtener disposición inmediata de liquidez”, dice en el acuerdo de Hacienda.
Por estos nuevos créditos el gobierno pagará una tasa de interés del 8.25% en un plazo de entre 330 y 360 días a los inversionistas nacionales o internacionales que aceptaron prestar los fondos.
Eso significa que los contribuyentes están pagando las consecuencias de que el Órgano Ejecutivo no consiga préstamos fuera del país a mejores de tasas de interés, debido al perfil crediticio que tiene en el extranjero, pues en el caso de los Cetes la anterior emisión había sido en octubre de 2022 por $200 millones pero a una tasa del 7.5% para pagarlos en menos de un año.
Según indica Hacienda en el acuerdo emitido en abril, los Cetes que emitan pueden ser redimidos antes del vencimiento “si se dispone de los recursos necesarios”.
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Con el aval de la Asamblea
La Asamblea Legislativa oficialista autorizó en 2020 al Ministerio de Hacienda para obtener recursos hasta por $2,000 millones por medio de emisión de títulos valores o créditos hasta completar la suma.
Hasta el 31 de diciembre de 2022, la deuda en Cetes ascendía a $1,330.1 millones; mientras que en Letes subió a $1,326.6 millones, según datos de Hacienda.
Para 2023, el gobierno tiene planificado la colocación de Letes por un monto de $1,698,851,895.
Entre las justificaciones que el gobierno plantea en el acuerdo para gestionar más deuda interna está que en el presupuesto de 2021 se aprobó buscar financiamiento complementario hasta por $1,412.9 millones.
Y se agrega en el documento que el decreto legislativo 608, de marzo de 2020, facultaba a Hacienda a gestionar un crédito puente y la aprobación para la emisión de Cetes, los cuales no han sido liquidados, ya que el gobierno no ha colocado títulos valores de largo plazo, es decir los bonos que se emiten en el mercado extranjero; con esos fondos pretendía pagar los Cetes emitidos, pero al no tener esos recursos argumenta que “es necesario autorizar el refinanciamiento para pagar el vencimiento de Cetes o cualquier crédito puente”.
Pero, además, el Ejecutivo alega que existen las condiciones financieras para seguir pidiendo préstamos a nivel local.
“Que las condiciones de liquidez que actualmente existen en el mercado nacional resulta conveniente a los intereses de la República proceder a la contratación de un crédito de corto plazo, bajo una modalidad financiera que permita la disposición inmediata de recursos que demanda la Caja Fiscal para la atención de las necesidades indicadas”, explica en el acuerdo.
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Agencias opinan lo contrario
Sin embargo, la agencia calificadora de riesgo Fitch advirtió en su más reciente informe sobre el país que la alta carga de la deuda, junto con fuentes de financiamiento internas “bastante limitadas”, mantendrá los costos de endeudamiento bastante altos.
“Anticipamos que los pagos de intereses alcanzarán el 19% de los ingresos del gobierno, según estimaciones de Fitch”, planteó, lo cual que está muy por encima del promedio que es entre 11.1% y 11.5%.
También expresó que las tasas de interés en el mercado externo “siguen siendo prohibitivamente altas” para que el gobierno emita un bono externo a largo plazo.
Asimismo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) señaló en su informe preliminar de febrero de este año, tras revisar las finanzas salvadoreñas, que el constante endeudamiento del gobierno con los bancos locales, mediante préstamos en Letes y Cetes, puede frenar el financiamiento para el sector privado y afectar el crecimiento económico.
Y alertó que en un escenario en el que El Salvador está sin acceso a préstamos en el mercado internacional “se prevé un aumento de la deuda pública de corto plazo”.
Pero además la agencia inglesa de análisis financiero EMFI (Emerging Finance) indicó en un reciente informe sobre El Salvador que debido a que el gobierno no puede adquirir deuda en los mercados internacionales, porque se enfrentaría a tasas de interés muy altas, “continúa dependiendo de la deuda interna y los préstamos multilaterales como sus principales fuentes de financiamiento”.
De acuerdo a los datos de EMFI, entre enero y abril el gobierno emitió $492.8 millones en Letes y $62.6 millones en Cetes.
Y agregó que el único desembolso de fondos reportado desde enero es por $5 millones del BID (Banco Interamericano de Desarrollo) y que planteó que el gobierno intentará recaudar entre $50 y $75 millones en el mercado regional para pagarlos entre 3 y 5 años.
“El gobierno intentará utilizar todas las escasas fuentes de financiamiento disponibles para llegar a fin de mes”, apuntó EMFI.