El Ministerio de Hacienda informó este lunes que han aceptado la propuesta hecha el pasado 24 de agosto por la Asociación Bancaria Salvadoreña (ABANSA) de ampliar los plazos para pagar la deuda interna de corto plazo que el Gobierno tiene con los bancos.
Por ley, el Gobierno tiene un año máximo para cumplir con ese compromiso. La propuesta que la banca privada hizo recientemente al Gobierno implica darle más tiempo para pagar dicha deuda.
En el comunicado que divulgó ABANSA, plantearon al Gobierno "una estructura de emisiones locales a plazos de 2, 3 5 y 7 años que permitirá reducir los niveles de deuda pública de corto plazo y obtener un mejor perfil de vencimientos de las obligaciones financieras de El Salvador a mediano plazo".
Hacienda dijo que coinciden con la propuesta y consideran "tendrá un impacto positivo en las finanzas públicas".
La deuda de corto plazo implica las Letras del Tesoro (Letes) y Certificados del Tesoro (Cetes) que emite el gobierno y que adquieren los bancos, mayoritariamente. Son mecanismos de financiamiento que el Ejecutivo utiliza como una “tarjeta de crédito” para cumplir con los pagos más inmediatos.
Según Hacienda, tras aceptar la propuesta de la banca, se pondrá en marcha un plan de nuevas emisiones a través del cual se hará el pago respectivo al vencimiento de cada título en posesión de los bancos; luego se emitirán nuevos títulos a un plazo mayor, sin incrementar la deuda del país.
En su comunicado publicado en redes sociales, el Gobierno, a través del ministro de Hacienda, Jerson Posada, interpreta la propuesta de la banca como un espaldarazo y confianza en las estrategias de manejo de las finanzas y política fiscal implementada en la gestión de Bukele.
Sin embargo, un economista que prefirió no ser citado declaró anteriormente a El Diario de Hoy que "los bancos, por las presiones que manejan, quieren llevar la fiesta de la mejor manera" y considera que por ello habría surgido la iniciativa, haciendo alusión a que la propuesta deja al descubierto la falta de capacidad financiera del Gobierno para pagar la deuda con los bancos.
"El saldo de la deuda de corto plazo es enorme y representa una erogación importante de fondos mes a mes, además de la presión porque es pagadera a un año plazo y lo que han estado haciendo es renovarla a través de roll over (reestructuración)", comentó el especialista.