El Ministerio de Economía informó los nuevos precios del tambo de gas que estarán vigentes en enero 2023, los cuales reflejan una leve alza respecto a diciembre 2022, de acuerdo a los costos del mercado.
Según la tabla de precios que ha difundido la institución, el tambo de 25 libras, que es el más usado en los hogares salvadoreños, costará $0.13 más; mientras que el de 35 libras, el cual es más consumido en los negocios, se eleva $0.17.
En tanto, los cilindros de 10 y 20 libras aumentarán $0.06 y $0.10 respectivamente, pese a que Economía matiza en su comunicado oficial que “experimentarán cambios a la baja” por factores internacionales.
De acuerdo a esa variación, por el tambo de 25 libras los salvadoreños tendrían que pagar en enero $11.26 y por el de 35 libras se debería cancelar $15.67; mientras que por el de 10 libras serían $4.67 y el de 20 libras costaría $9.08.
Sin embargo, los precios del gas para el consumidor final se mantendrán como estaban el mes pasado, debido a la prórroga del subsidio que fue aprobada en diciembre.
PUEDE LEER: Diputados extienden subsidio al gas licuado hasta febrero de 2023
El Ministerio de Hacienda solicitó a la Asamblea Legislativa que avalara la extensión del beneficio en el caso de este producto derivado del petróleo, pero no así del subsidio a los combustibles, el cual caducó el 31 de diciembre.
Los diputados prorrogaron hasta el 28 de febrero 2023 la subvención al gas, implementado mediante “Ley Transitoria para la Estabilización de Precios del GLP (Gas Licuado de Petróleo)”, la cual fue aprobada el 29 de septiembre de 2021 ante la escalada de precios del petróleo a nivel internacional.
Con la ampliación del plazo para el subsidio los precios quedarán de la siguiente manera: el cilindro de 35 libras en $15.50; el de 25 libras en $11.13; el de 20 libras en $8.98 y el de 10 libras en $4.61.
Eso significa que el gobierno deberá absorver ese incremento reflejado en los precios de mercado, pero pagado con el dinero proveniente de los impuestos que aportan los salvadoreños.
Por su parte, los ciudadanos que tienen subsidio focalizado de gas pagarán menos por el tambo de 25 libras, pues se mantiene la ayuda de $8.04 y eso implica que solo pagarán $3.09 por el producto.
Los que compran el cilindro de 35 libras pagarán $7.46, los que adquieren el de 20 libras cancelarán $0.94 y por los de 10 libras no pagan nada.
¿Cómo funciona la cadena de comercialización del gas?
El gobierno de Nayib Bukele paga el subsidio directamente a las gaseras para que los aumentos no los apliquen al consumidor final.
Para esa subvención, Hacienda ha programado $82.9 millones en el presupuesto 2023.
Según detalla Economía, la cadena de comercialización del gas tiene cuatro eslabones antes de llegar a las manos de los consumidores. El primero lo forman las compañías de gas licuado, las cuales le venden el producto a las empresas envasadoras, luego éstas a los distribuidores y ellos a los puntos de venta donde los compran los usuarios.
Por ejemplo, en el caso del tambo de 25 libras, según precios vigentes en enero, la compañía lo venderá a $8.61 a la envasadora, luego ésta lo venderá al distribuidor a $9.67, quien lo comercializará a $10.76 en los puntos de venta y, por último, el consumidor lo comprará a $11.13.
En el caso del tambo de 35 libras su costo inicial en esa cadena será de $12.05 hasta llegar al cliente final a $15.50.
Factores internacionales que influyen en los precios del gas
Aun así, Economía indica que hay tres factores que han incidido en la “baja” de precios del gas. Uno de ellos es el aumento de las reservas de derivados del petróleo, como butano y propano, en el mes de diciembre en Estados Unidos.
El otro es que las “temperaturas menos frías” en Estados Unidos durante diciembre “permite que la demanda derivados de petróleo para calefacción sea menor con respecto a los años anteriores”. Sin embargo, los estadounidenses han experimentado una de las tormentas invernales más cruentas.
Por último, dice que lo incrementos en las tasas de interés reportadas por Estados Unidos, Inglaterra y Reino Unido “favorece la caída de precios internacionales de los hidrocarburos”.