La industria metalúrgica de El Salvador está de duelo con el fallecimiento de una de sus máximas exponentes: doña Nelly Sarti, presidenta del grupo metalúrgico Sarti y representante de otras firmas importantes y organizaciones altruistas, quien falleció en esta capital, informaron familiares y amigos.
No hay estructura de acero o aluminio (portones corredizos, puertas, cortinas, verjas, muebles y otros productos metálicos) que no tenga el sello de esta compañía ni salvadoreño que no recuerde el nombre Sarti.
Hija de don Vicente Sarti y doña Anna María Tarabiono, Nelly Teresa Sarti Tarabiono nació 23 de noviembre de 1932. Estudio en el Colegio La Asunción y luego arte y la literatura en el extranjero hasta que se graduó en administración de empresas en la Universidad Centroamericana (UCA) para hacer frente al legado de su padre.
Doña Nelly asumió la presidencia de Sarti desde 1965. Con ella comenzó la era de la fundición de hierro, aluminio y bronce, en una época en que la dirección de talleres e industrias de ese tipo estaba a cargo casi exclusivamente de hombres.
Durante la guerra de los años 80, su empresa fue acosada por la guerrilla y ella misma sufrió un atentado del que escapó ilesa, no así algunos de sus colaboradores. “Fue un momento muy crítico para nosotros, pero nunca dejamos de trabajar”, recordó.
Grupo Sarti, que se compone de Taller Sarti y la Metalúrgica Sarti, inició su trayectoria en 1928. En los últimos años ha desarrollado una diversidad de productos para la agroindustria.
En 2018, la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador reconoció la trayectoria del Grupo Sarti y su presidenta, Nelly Sarti, tanto en el rubro metalúrgico como agroindustrial. Años antes fue galardonada con el Premio ASI.
“Amor y pasión por el trabajo” fue la clave de su éxito, según recordó entonces a la que llegaron a llamar “la Dama de Hierro”.
“Fuimos pioneros en el área de máquinas de beneficios de café y en los ingenios de azúcar”, recordó doña Nelly en esa ocasión.
Otros de sus productos estrella son las cortinas de acero plegables orientadas a almacenes, industria, cocheras y residenciales, así como las puertas estilo acordeón, todas elaboradas en metal.
El grupo industrial además se compone de una fundidora llamada Metalúrgica, ubicada en la carretera hacia Santa Ana, entre ambas líneas de negocio generan más de 200 empleos directos.