La primera oferta pública de activos digitales de deuda en nuestro país, destinada a financiar la construcción del Hotel Hampton by Hilton del Aeropuerto Internacional de El Salvador, fue un fracaso al no alcanzar ni siquiera el monto mínimo esperado de $500,000, quedando en apenas $342,000, según información colgada en la página web de Bitfinex Securities, la plataforma en la que se transaron los tokens.
A mediados de abril, Inversiones Laguardia S.A. de C.V. (Inverlag) anunció el lanzamiento de bonos tokenizados en la blockchain para recaudar $6.5 millones que financiarán el proyecto. Fueron bautizados como HILSV, con un valor unitario de $1,000. Por lo tanto, se vendería un total de 6,250 de estos. Se colocó como importe mínimo necesario para la realización del proyecto los $500,000.
La oferta inició el 11 de mayo y se estableció un mes como plazo, es decir, hasta el 11 de junio. Esta ventana permaneció, incluso, abierta unos días más, pero no hubo éxito.
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Fueron solo $342,000 los recaudados, lo que significa un problema para las empresas involucradas, pues el “Documento de Información Relevante” de HILSV aclara que, si en esta fase no se conseguía el importe mínimo necesario, los inversores de la oferta pública podrán recuperar su aportación.
“Los compradores que participen en la oferta pública de activos digitales podrán recuperar su aportación si (i) no se alcanza el importe mínimo (cantidad mínima necesaria para llevar a cabo el proyecto), que para esta emisión será de quinientos mil dólares estadounidenses ($500,000.00), al final de la oferta pública o (ii) si se cancela la emisión de los activos digitales”, se lee en el documento, colgado en la web de Bitfinex Securities.
Si esto sucediera, se estableció un protocolo de devolución, que depende de la manera en la que fueron adquiridos los tokens. Si se hizo mediante activos digitales (como criptomonedas), se haría a través de la misma plataforma en la que se transaron. Si fue por la compra de tarjeta de crédito o débito será mediante la anulación de la operación. En el documento se aclara que los costes asociados a la revisión correrían a cargo del emisor, es decir, Inversiones Laguardia.
En el lanzamiento del proyecto, realizado a principios de junio, se reveló que el inmueble contará con 80 habitaciones, cinco espacios comerciales y otras amenidades que incluyen piscina, restaurantes, gimnasio, jardines y salones de usos múltiples.
La previsión de su apertura sería en 2025, según se dijo. Roberto Laguardia, fundador de Inverlag, informó que en sus planes está desarrollar una segunda fase en la misma zona con igual número de habitaciones. Pero el proyecto fracasó.
“Creo que el problema es que el rendimiento que se ofrecía a los inversionistas quedó por debajo de la emisión del gobierno, al 12 %. Eso juega en contra… Es probable que haya habido errores de diseño, como la garantía, bastante sui generis, de una concesión del Gobierno. Un tercer elemento es que el entorno económico todavía es incierto”, explica el economista Otto Rodríguez.
El fracaso de HILSV contrasta con el éxito de la empresa MIO3, que logró financiar y vender un proyecto de bodegas.
El Diario de Hoy buscó una reacción de las compañías involucradas al fracaso de la apuesta. Para ello se consultó el “Documento de Información Relevante” de HILSV, donde hay información de contacto, números de teléfono y dirección de cada una.
En el caso de Inversiones Laguardia, el emisor del activo, se visitó el local indicado como su sede, el 630 de la 93 avenida Norte, de la Colonia Escalón, en San Salvador. Sin embargo, allí indicaron que la única compañía domiciliada allí es una llamada Inglés Corporativo. También se llamó al teléfono indicado en el documento. Contestaron y afirmaron que ese número es de otra sociedad.
También se dejó una solicitud en la sede de Bitfinex Securities (plataforma en la que se transaron los tokens), que resultó ser la oficina del bufete de abogados que le representa en el país, en Torre Futura.
En el caso del proveedor de los servicios de tokenización de activos digitales, Ditobanx, y del certificador, TR Capital, se llamó a sus números de teléfono, donde aseguraron que contestarían a la brevedad. No hubo respuesta de ninguna de las compañías al cierre de esta nota.
El proyecto no llegó a buen puerto a pesar de haber contado con el respaldo gubernamental. Milena Mayorga, embajadora de El Salvador en Estados Unidos, participó del evento de lanzamiento en junio. Además, la emisión fue publicitada por la Oficina del Bitcoin y por la Comisión Nacional de Activos Digitales (CNAD).
Un proyecto largamente acariciado
La agencia de noticias EFE publicó que, el 26 de septiembre de 2017, la Junta Directiva de la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA), que administra el aeropuerto, autorizó un contrato con Inversiones Laguardia para el arrendamiento de un terreno para la construcción de un hotel.
Este fue anulado por acuerdo de las partes y se habría autorizado uno nuevo en noviembre de 2018 “para desarrollar infraestructura con fines hoteleros” por el plazo de 30 años, entre el 1 de noviembre de 2018 al 31 de octubre de 2048. Se desconoce si, con la llegada del actual Gobierno en 2019, se modificó el contrato.
Inversiones Laguardia es apenas una de dos compañías que han obtenido una licencia como Emisores de Activos Digitales frente a la CNAD, el 5 de abril de 2024.
Influyente y señalada
Bitfinex, la plataforma donde se comercializó HILSV, genera varias banderas rojas por sus parentescos. Tether, su empresa hermana, fue señalada en el Congreso de Estados Unidos de facilitar actividades de lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo debido a sus deficientes controles y a contar con “puntos de contacto” con el sistema financiero estadounidense. Por ello, se instó al Departamento del Tesoro, a tomar medidas enérgicas contra la compañía.
Tether y Bitfinex están lideradas por las mismas personas, los italianos Paolo Ardoino y Giancarlo Devasini, que cuentan con una alta influencia en el Gobierno de El Salvador. Desde Bitfinex ha salido más del 80 % del Bitcoin que, según Nayib Bukele, se ha depositado en la “billetera fría”, incluyendo cada uno de los “Bitcoin al día”.