Las asociaciones que aglutinan a pequeños productores agrícolas no han reportado mayores daños a cultivos en el marco de las intensas lluvias que azotan a El Salvador.
Según Luis Treminio, presidente de la Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (CAMPO), es posible que se deba a que se había recomendado no sembrar el maíz hasta la segunda quincena de junio, pues el calor intenso de los meses anteriores había resecado la tierra. Por tanto, sugirieron que se esperaran las primeras lluvias para que se pudiera hidratar un poco.
“Para nosotros, estas lluvias van a ser beneficiosas”, dijo Treminio.
Sin embargo, Carlos Rodríguez, secretario general de la Asociación Nacional de Trabajadores Agropecuarios (ANTA), afirmó que es posible que algunos campesinos sí hayan decidido sembrar. Los estragos no serían tantos, pues se trataría de plantas con pocas semanas.
“Eso, sobre todo, en los lugares donde se han desbordado las aguas, las partes bajas, como Tecoluca, Usulután, parte de San Miguel”, comentó Rodríguez.
Las proyecciones de producción de granos básicos para el ciclo agrícola 2024-2025 son menores en más de 2 millones de quintales a las del ciclo pasado, según las estimaciones de CAMPO.
MAG no reporta daños en cultivos
Durante una conferencia de prensa el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) a través del encargado de despacho, Oscar Domínguez, informó que hasta la fecha se han registrado daños menores en las zonas de cultivos.
“Mantenemos una inspección constante en territorio y en forma digital, empezamos a tener las primeras cifras, es información preliminar, al ir pasando la emergencia tendríamos los datos concretos con los que ya podemos contar con un reporte al final”, afirmó Domínguez.
Entre los primeros datos señaló que la dirección de sanidad vegetal registra “un 63.8% (cultivos) sin afectación por lluvias, quiero aclarar que son de los departamentos donde más producción nacional tenemos”, agregó.
Las principales afectaciones son el estrés hídrico, cama de cultivo y presencia de hongos, en muy pocos cultivos se habría detectado hidroxia (cuando las raíces no son capaces de absorber el agua y luego viene la muerte de la planta) “se ha encontrado muy poco, pero si continuamos así se puede ir multiplicando”.
Al menos tres estructuras de cultivos para invernaderos en Cuscatlán y Santa Ana han sido dañadas por el exceso de lluvias y las ráfagas de vientos.
“Llevamos más de 2 mil productores asistidos, 1,125 manzanas de granos básicos inspeccionadas, 104 manzanas de hortalizas y frutas, entre otras”, Domínguez argumentó que “esos cultivos todavía está bien, pero de seguir con mucha lluvia es probable que esos cultivos logren un mayor daño”.