En el país hay más de un millón de microempresarios que tienen ingresos solo para subsistir con sus negocios, según datos de la Comisión Nacional de la Micro y Pequeña Empresa (Conamype).
De acuerdo a datos de la institución, son 270,000 microempresarios y 840,000 trabajadores por cuenta propia o en la informalidad que día a día se rebuscan con sus ventas para empujar la economía.
Paul Steiner, presidente de Conamype, explicó que según los datos que tienen a la fecha en el país hay 20,000 empresas pequeñas, 1,680 empresas medianas y 980 empresas grandes.
Del 1.2 millones de empresarios salvadoreños, el 97% son de micro y pequeñas empresas, además de los trabajadores por cuenta propia. El funcionario destacó que esa fuerza económica es la que mueve "el sustento" de la mayoría de la población. Allí se pueden mencionar panaderías, tortillerías, pupuserías, tiendas en colonias y barrios, entre otros micro negocios.
Steiner reconoció que el hecho de que el 95% de negocios en El Salvador sean de subsistencia "es la situación grave del país" en el área económica. "Facturan menos de $2,400 al mes y eso los deja apenas tablas y endeudándose más cada día los que están debajo de $2,400. Y ese 95% le da de comer a 4.8 millones de salvadoreños", indicó este martes durante entrevista matutina de canal 21.
El funcionario añadió que se debe reforzar a ese 95% de microempresarios para que salgan de la subsistencia y mejoren no solo su economía, sino la del país que este año crecerá menos que las del resto de Centroamérica.
De acuerdo a datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), la economía de El Salvador crecerá solo 2.5% este año y será la de menor crecimiento en la región en 2022. El Banco Central de Reserva ha pronosticado que la economía crecerá 2.6%.
Por su parte, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) reportó que el mes pasado que una de cada dos personas trabaja en el sector informal de la economía en la región.
La directora regional interina de la OIT para América Latina y el Caribe, Claudia Coenjaerts, alertó que "se calcula entre 50 y 80 % de empleos recuperados en 2022 son en condiciones de informalidad" y que la crisis actual, por la tendencia inflacionaria al alza, podría generar más aumento de informalidad laboral.
Añadió que hay países en la región con más del 70 % de sus trabajadores informales, mientras que el promedio en Latinoamérica y el Caribe es del 50 % lo que, sumado a unos menores ingresos, ha abierto la puerta "al fenómeno del trabajador pobre".