Los agricultores deben ser muy cautelosos para realizar la siembra y un factor determinante es cómo les puede afectar el cambio climático.
Por ejemplo, en 2018 El Salvador vivió una prolongada sequía que inició el 25 de junio y duró 42 días.
Ante ello, el presidente de la Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo), Luis Treminio, explicó que la fecha recomendada para la primera siembra es a partir de la segunda semana de junio, que comprende del 6 al 12.
"Se tiene pronosticado que a finales de mayo habrá lluvias fuertes, por lo que a inicios de junio habrá humedad para que los agricultores siembren la segunda semana de junio", recomendó Treminio.
El Centro Nacional de Huracanes ha pronosticado fuertes lluvias asociadas con un patrón del tiempo conocido como el "Giro Centroamericano", las cuales podrían causar inundaciones desde este jueves por la noche hasta el próximo lunes 23 por la noche.
El Salvador sin un plan nacional para el corredor seco
La segunda siembra, denominada postrera, que se realiza por lo general en el oriente del país, está planificada para que se realice en la última semana de agosto.
Sin embargo, Treminio dijo que hay que ser cuidadoso, ya que el Ministerio de Medio Ambiente también ha pronosticado un período seco para finales de julio y principios de agosto.
Según el conocimiento de los agricultores, cuando las lluvias aparecen temprano luego se presenta un período de sequía, por lo que deben prever esta situación para no verse nuevamente afectados como sucedió en 2018 cuando se perdieron 6 millones de quintales de maíz.
Al sembrar el grano de maíz el desarrollo de la planta no sufre ninguna interrupción por falta de agua. Es a partir de los 25 días y hasta los 60 días que la planta sí necesita más cantidad de agua y es cuando proyectan que estaría lloviendo constantemente.
“La planta de maíz necesita mayor tiempo de lluvia a partir de los 25 días de siembra, ya que los primeros 20 o 25 días hasta los 60 es cuando empieza a desarrollarse con fuerza y a florear”, explicó Treminio.
Este año se estima que se sembrarán 300,000 manzanas de maíz y las proyecciones son producir unos 15 millones de quintales, si los agricultores toman las medidas para contrarrestar posibles inundaciones por lluvias o posibles sequías, agregó el dirigente.