Los efectos de la tormenta tropical Sara en El Salvador ya han causado estragos en diferentes cultivos. El más afectado fue el frijol, que es especialmente vulnerable a la humedad cuando está maduro. El Gobierno confirmó afectaciones también en maíz, así como en productos el ajonjolí, la sandía y el pipián.
Según reportes preliminares de gremiales como la Mesa Agropecuaria Rural e Indígena y la Asociación Nacional de Trabajadores Agropecuarios (ANTA), las afectaciones se registran a escala nacional. Sin embargo, todavía no pueden dar una cifra global de los daños, pues los informes están en plena elaboración.
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Mateo Rendón, coordinador nacional de la Mesa Agropecuaria, afirma que el cálculo de su organización es que se ha perdido el 60% del frijol sembrado en todo el territorio salvadoreño.
"Está irrecuperable", comenta el líder gremial, que ha obtenido los datos de los miembros de la organización ubicados en cada departamento.
Carlos Rodríguez, secretario general de ANTA, comentó que solo en los departamentos del centro del país, como La Libertad y San Salvador, han tenido la confirmación de la pérdida de 500 manzanas de frijol. También se han arruinado cultivos de maíz en el oriente del país, donde cultivan tarde en el año.
"El frijol es bien delicado cuando ya está en maduración. Con unos días en que no haya sol, la vaina se pudre. Esto ha afectado, más que todo, a los que sembraron a principios de septiembre. No tanto a los que lo hicieron en octubre, pues todavía está tierno... no esperábamos estas lluvias", comenta Rodríguez.
El Diario de Hoy visitó los caseríos El Limón y el Icaco, en Usulután Este, donde las lluvias inundaron las viviendas y terrenos agrícolas. "Es una perdida total", comentó un agricultor de la zona. Los trabajadores de la tierra del lugar se acercaron a sus cosechas para inspeccionar si había una manera de salvarlas, pero estaban bajo el agua.
Antes de la llegada de la tormenta Sara, ya era un hecho que en este año iba a haber una cosecha de frijol menor a la del año pasado, pues en este ciclo (2024-2025) se sembraron 33,000 manzanas menos, una cuarta parte del total, pasando de 143,000 a 110,000, según los datos de CAMPO.
Tomando en cuenta esa superficie sembrada y el rendimiento usual de la tierra, se producirían 1.65 millones de quintales, por lo que eso representa un déficit de 750,000 quintales con respecto a la demanda de la población, calculada por la entidad en 2.4 millones de quintales. Ahora, con las pérdidas en el marco de la tormenta tropical, el déficit será mayor.
Promesa de asistencia sin informar a líderes
El presidente Nayib Bukele anunció este domingo que se entregarán bonos por $300 a casi 1,000 agricultores que perdieron sus cultivos con las lluvias. Añadió que se distribuirán 50,000 paquetes de alimentos para "las familias afectadas en esas zonas".
Sin embargo, no dio mayores detalles, como las zonas de donde son los trabajadores de la tierra que serían beneficiados con el bono.
"El único Presidente que se ha preocupado por el sector agro del país y en todos los aspectos", escribió, por su parte, Óscar Domínguez, encargado de despacho del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), como respuesta al mensaje en X de Bukele.
La mañana de este lunes, Domínguez publicó en esa red social que personal del MAG está realizando monitoreos a escala nacional junto a los gobiernos municipales y la Policía Nacional Civil. Allí. dijo que están recopilando la información "directamente con las familias afectadas", y que verificarían "en territorio quienes necesitan el apoyo".
"Priorizaremos a los más vulnerables. Los agricultores de subsistencia que han perdido todo podrán optar por el bono que nuestro Presidente Nayib Bukele anunció, este bono será utilizado única y exclusivamente para adquirir insumos agrícolas", dijo Domínguez.
Si no se sabe cuántas familias necesitarán de apoyo, ¿cómo es que se eligió el número anunciado por Bukele? ¿Se modificará dependiendo de la realidad?
"No somos 1,000 productores los que hemos perdido nuestras cosechas, somos muchos más. Cuando saquemos nuestro reporte de pérdidas y el MAG saque el suyo, nos vamos a dar cuenta de eso. No sabemos a quiénes se les va a dar el apoyo", comenta Carlos Rodríguez, secretario general de ANTA.
Según este mismo dirigente y Mateo Rendón, de la Mesa Agropecuaria Rural e Indígena, ninguna autoridad se ha acercado a ellos para que estas entidades puedan brindar algún tipo de apoyo, dado que estas organizaciones cuentan con una amplia red territorial.
La decisión desde el MAG, por tanto, ha sido la de excluir de nuevo a las gremiales en este tipo de acciones, como ha sido la constante al menos desde finales de 2022.
Hace dos semanas, el encargado del despacho del MAG se reunió con un grupo de representantes de organizaciones que aglutinan a productores agropecuarios en El Salvador, el funcionario conversó con ellos para invitarlos a ser parte de un programa que pretende que productores nacionales ubicados en distritos de riego o que cuentan con esta facilidad en su terreno, se conviertan en proveedores de verduras y hortalizas para la central de abastos recientemente inaugura en San Salvador Este y para los agromercados.
Esa fue la primera reunión de ese funcionario con líderes gremiales desde que está en el cargo.