Los salvadoreños que poseen vehículo se enfrentan a un nuevo golpe a su bolsillo a partir de hoy: según los datos de la Dirección General de Energía, Hidrocarburos y Minas (DGEHM), los precios de los combustibles experimentarán un aumento significativo para la quincena que inicia hoy y que termina el próximo 1 de mayo.
De acuerdo con los datos de la institución, es la gasolina superior la que más aumento experimentará, pues pasará de un costo de $4.46 en la quincena anterior a costar hasta $4.67 por cada galón en la zona central, mientras que en la occidental y en la oriental se colocará en los $4.68 y los $4.71, respectivamente.
La gasolina regular tendrá un aumento de hasta $0.12 en la zona central, donde llegará a los $4.39 por galón, mientras que en las zonas occidental y oriental alcanzará los $4.40 y los $4.43, respectivamente.
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De todos los combustibles es el diésel el único que experimentará rebajas, aunque leves, pues para la zona central disminuirá $0.04 hasta los $3.96. El precio para la zona occidental será de $3.97 y para la oriental será de $4.01.
Según la DGHEM, una de las causas de este nuevo aumento es que han disminuido las reservas internacionales de petróleo, gasolinas y diésel, algo que ha sido reportado por la Agencia Internacional de Energía (AIE).
Asimismo, la institución indica que los países miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) han anunciado recortes significativos que han afectado la producción del crudo.
Por su parte, el diésel ha bajado de precio debido a que hay una caída en la demanda de los países del hemisferio norte, pues estos ya no necesitan ese combustible para poner a funcionar los sistemas de calefacción.
Los nuevos precios que ha anunciado la institución son, de hecho, muy superiores a los que se fijaron el año pasado para contener el avance de la inflación, algo que permitió que durante nueve meses se mantuvieron estables.
Ese decreto, que venció el 31 de diciembre pasado, mantuvo el precio de la gasolina súper en $4.31 y el de la gasolina regular en $4.15, mientras que el del diésel se mantuvo en $4.14 y es el único que estará por debajo de ese valor en la próxima quincena.
Debido a esto, en el caso de la gasolina especial, en la zona oriental el precio supera hasta en $0.40 al precio máximo fijado el año pasado, por lo que los nuevos precios ya superaron a los más altos que se registraron antes de ese decreto.
Hasta el momento, el gobierno no ha anunciado si volverá a implementar la medida de fijación de precios en los combustibles, la cual consistió en suspender temporalmente algunos de los impuestos que pagan los salvadoreños por cada galón que compran, entre ellos el IVA y la Contribución al Transporte (subsidio), denominado como Cotrans.
El impacto en el costo de la vida
Estos aumentos en el precio de los combustibles se suman a otros que hacen que el costo de la vida en el país se vuelva más alto, sobre todo en el rubro de los alimentos, en el cual la Canasta Básica Alimentaria (CBA) ya alcanzó casi los $250 para el sector urbano y superó los $187 en el área rural.
Entidades como el Centro para la Defensa del Consumidor (CDC) han explicado anteriormente que estos incrementos se trasladan directamente a las familias salvadoreñas pues, un rubro que se ve afectado con estos valores es el de los alimentos que se consumen a diario en el país.
Lo anterior debido a que los combustibles ocupan un papel importante dentro de la cadena de distribución de suministros, incluyendo los alimentos y mercancías en general.
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Lo único positivo en este aspecto es que el diésel, el principal combustible utilizado en los vehículos de carga, presentará una baja, sin embargo, sigue manteniéndose considerablemente alto si se compara con los precios que registraba en 2021.
De hecho, el aumento que ha tenido este tipo de carburante va de la mano con el incremento que han tenido los alimentos desde, precisamente, principios de ese año, época en la que la inflación en el país comenzó a dispararse.
El titular del CDC, Danilo Pérez, explicó recientemente a El Diario de Hoy que “ala base de los alimentos está la energía y el petróleo”, por lo que un aumento en los combustibles puede derivar en aumentos generales en el costo de la vida y que son absorbidos por la población.