Este 1 de junio no ha comenzado bien para los bitcoiners: el precio de la criptomoneda ha caído a $29,673 luego de una leve subida a inicios de esta semana, cuando mostró signos de recuperación al superar los $30,000.
El precio de este criptoactivo ha caído durante nueve semanas consecutivas presionado por la desconfianza de los inversores, que siguen buscando alternativas tradicionales más seguras para resguardar sus activos.
El lunes intentó despuntar hasta alcanzar los $31,000, pero este miércoles nuevamente ha caído y su tendencia sigue a la baja.
El Salvador acumula $38 millones en pérdidas por caída en el precio del Bitcoin
La gran pregunta para muchos conocedores del Bitcoin vuelve a ser: ¿Por qué el gobierno de Nayib Bukele sigue gastando dinero de fondos públicos en una moneda en la que su volatilidad es cada vez más evidente?
Desde septiembre de 2020 hasta el 9 de mayo, el gobierno ha comprado en total 2,301 monedas Bitcoin, en las que ha gastado un aproximado de $104 millones del dinero de los ciudadanos; monedas que por el precio actual del Bitcoin, el valor es de unos $67 millones. Es decir, $36 millones menos de lo que el gobierno pagó por ellas.
Hasta el momento, las compras no parecen tener una justificación concreta, pues desde que impuso el Bitcoin como moneda legal en el país, el Bitcoin llegó solo una vez a valer $67,000 y fue en noviembre pasado. Desde entonces su caída ha sido constante.
El ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, dijo este miércoles en una entrevista televisiva que el Bitcoin "es una moneda fuerte" y que estaba recuperando su precio, pese a que este criptoactivo ha perdido el 50% de su valor desde noviembre del año pasado, cuando alcanzó su máximo histórico.
Este ha sido el principal motivo por el que el gobierno aún no ha colocado los bonos Bitcoin, que darían más de $1,000 millones al Gobierno. "El precio sigue trastocado por la guerra en Ucrania. Hubo muchos movimientos en el mercado de valores", justificó Zelaya.
Gobierno compra más Bitcoin pese a registrar pérdidas en los últimos seis meses
Semanas atrás, la agencia de noticias AFP, informó que el declive de la criptomoneda está ligado a la prudencia de los inversores por el temor relacionado con la guerra de Rusia y Ucrania, el confinamiento en China por el COVID-19 y la adopción de una política monetaria restrictiva en Estados Unidos. Pese a ello, El Salvador sigue confiado.
Asimismo, los anuncios de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) en torno a nuevas alzas en las tasas de interés para controlar la inflación (aumento en los precios de los bienes y servicios) ha influido en la volatilidad de la criptomoneda.