Los depósitos en el sistema bancario han aumentado en más de $400 millones en el último año, según los más recientes datos de la Asociación Bancaria Salvadoreña (Abansa), que muestra una cantidad acumulada de $15,864.0 millones frente a $15,423.6 millones regitrados en febrero de 2021.
Sin embargo, la mayoría ($10,309 millones) son depósitos a la vista, es decir que pueden ser fácilmente retirados a través del servicio de ventanilla o por medio de los canales electrónicos o tarjetas de cada banco.
Y entre estos, son los depósitos de ahorro los que más han crecido tomando en cuenta que se han agregado $573 millones más en un año, lo que significa un crecimiento del 12.1 %.
¿Qué tanto han aumentado los precios de los bienes y servicios en el país?
También han crecido los depósitos a cuenta corriente, con $195 millones más que hace un año.
La diferencia entre estas es que la cuenta corriente tiene como fin contar con un fondo de dinero para su uso cotidiano. En cambio, los depósitos en la cuenta de ahorros buscan la preservación y generación de capital.
Otro dato importante en las cifras del sistema bancario es el crecimiento de los depósitos a través de cuentas de ahorro simplificada, es decir, aquellas que no requieren demasiados trámites y son administradas por medio de aplicaciones en los teléfonos móviles.
Estas cuentas van tomando cada vez más protagonismo a partir de una serie de inversiones digitales que los bancos han hecho en los últimos años con el fin de aumentar el acceso financiero formal a los salvadoreños.
Aunque la cantidad de depósitos acumulados aún es mínima, ($2.4 millones a febrero 2022) su crecimiento porcentual respecto a 2021 es de más del 51 %.
Estas cuentas regularmente solo requieren el número de DUI y otros datos personales básicos sin necesidad de que el ciudadano tenga que ir a una agencia bancaria.
Expertos en economía señalan que el aumento en las remesas así como una recuperación en los empleos formales son algunos de los factores que podrían estar detrás de este crecimiento de depósitos.
Depósitos a plazos
En cambio los depósitos que se colocan a plazos, es decir, aquellos que no se pueden tocar por determinado tiempo, han disminuido.
Los datos de Abansa muestran que los depósitos a un año plazo disminuyeron en $248.8 millones (4.8%) y los depósitos a más de un año plazo disminuyeron en $50.2 millones respecto a un año (14.3%).
Los depósitos son un dato importante en el pulso económico de un país pues representan la confianza de los ciudadanos en el sistema bancario para el manejo de sus fondos personales.
Además, cada depósito está respaldado por el Instituto de Garantía de Depósito (IGD) que desde el 1 de enero de este año ofrece un respaldo de hasta $10,832 a cada ahorrante.
Los datos podrían seguir variando en los próximos meses dados los cambios en la política monetaria de Estados Unidos. La Reserva Federal confirmó hace unas semanas un aumento en las de interés para tratar de equilibrar la economía, que sigue afectada por una elevada inflación.
El primer aumento de tasas fue moderado, en un cuarto de punto porcentual, para llevarlas a un rango de 0.25% a 0.50%, pero la mayoría de los miembros del comité monetario de la Fed esperan tasas de 1.75% a fines de 2022.
Esto incidiría en las políticas de cada banco, que debe hacer ajustes a sus costos de préstamos y manejo de dinero.
Según los datos de Abansa, los préstamos netos siguen creciendo a un ritmo del 7.4%.
A febrero de este año la cantidad de dinero prestada a personas naturales y empresas acumuló los $13,840 millones, lo que significa $954 millones más que hace un año. Este dinero sigue circulando entre la población, reinvirtiéndose y generando ganancias.