El alto costo de los alimentos continúa sin darle tregua al bolsillo de las familias salvadoreñas, las cuales han tenido que enfrentarse desde 2021 al fuerte y acelerado aumento en el índice de inflación.
Pese a que septiembre pintaba con ser un mes que daría inicio a una esperada reducción en ese costo de los alimentos, octubre devolvió a la realidad esa problemática que, según una encuesta de ese mes, es la que más preocupa a los salvadoreños: el tema económico.
En septiembre, el precio de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) para el sector urbano bajó hasta los $237.89 con respecto al precio que reflejó en agosto ($238.95), algo que se traduce en una disminución de apenas un 0.44%, o menos de un dólar en términos monetarios.
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Sin embargo, para octubre lo que pagan las familias por la canasta básica subió, de nuevo, hasta los $239.87, en un valor que supera en casi un dólar al que costaba en agosto y en casi $2 al valor de septiembre, según los datos oficiales de la Oficina Nacional de Estadísticas y Censos (ONEC), la cual maneja los datos que anteriormente manejaba la ya disuelta Dirección General de Estadísticas y Censos (Digestyc).
Golpe a las familias en lo rural
A pesar de que el alza en el precio de la CBA urbana es poco notable, es la canasta básica del sector rural la que más aumento ha experimentado en los datos más recientes.
Según los registros de la ONEC, en octubre el costo de los alimentos en ese sector llegó a los $183.36, un valor que supera en casi $10 al precio que se registró en septiembre cuando se ubicó en los $173.97.
En ese sentido, y aunque la CBA rural subió fuertemente en un solo mes, hay que señalar que con respecto a agosto había tenido una reducción de unos $5.50, pero al realizar la comparativa entre el dato más reciente y el de hace dos meses, el precio sigue siendo unos $3.89 más alto.
Esa diferencia se amplía mucho más si se realiza la comparación con respecto al precio que mostraban los alimentos en octubre de 2021, cuando ya había, incluso, una sensible alza en los costos.
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Los datos de la ONEC arrojan que hace un año la CBA urbana tenía un costo de $212.55, es decir, casi un 12% menos de lo que vale hoy, mientras que la rural tenía un valor de $153.55, lo que equivale a casi $30 menos (o 19% menos) en el gasto para las familias salvadoreñas.
En este punto hay que señalar que el precio de la CBA estimado por la ONEC es con base en un cálculo de que lo que podría consumir una familia de cuatro miembros, por lo que el dato no es definitivo y podría ser incluso más alto para aquellas familias con cinco o más integrantes.
Además, con estas cifras oficiales se confirma nuevamente que 2022 ha sido el año con los precios más altos de la Canasta Básica de los últimos 21 años, pues la ONEC no posee registros anteriores a 2001 para poder realizar una comparativa más amplia en el tiempo.
Asimismo, estos aumentos tienen sus razones en la también fuerte alza en el índice de inflación que la mayoría de economías experimentan a nivel mundial, y la cual fue impulsada por toda la coyuntura económica entorno a la pandemia de covid-19, incluyendo los confinamientos y la posterior reactivación económica.
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De hecho, y por ese mismo contexto, la inflación en El Salvador también ha tenido un alza significativa, aunque bajó levemente en noviembre (ver nota aparte).
Granos básicos, con precios volátiles
Otro de los parámetros que reflejan ese aumento en el precio de los alimentos es el Informe Diario de Productos Agropecuarios que maneja el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), el cual es actualizado de manera regular en el sitio web de esa institución.
Según el dato más reciente, publicado el 7 de diciembre, la mayoría de alimentos, sobre todo los granos básicos, no han presentado ninguna disminución en el precio.
Un ejemplo de ello es el frijol, específicamente el de seda nacional, el cual tenía un costo de $57.40 por quintal en enero y en septiembre llegó a $90.
Algo que llama la atención es que en diciembre presenta un “leve” aumento de $1 con respecto a septiembre, sin embargo, hay que tomar en cuenta que en octubre los precios se dispararon, pues llegó hasta los $100 en el Mercado Central, en San Salvador, mientras que en otras zonas, como Chalatenango, llegó incluso a valer $107.
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Pese a que esos $91 que vale el quintal en San Salvador es una cifra relativamente baja con respecto a octubre, en otras zonas como La Unión se mantiene arriba de los $98, según los datos del MAG.
Por otro lado, los huevos también forman parte de los alimentos que han tenido una fuerte alza en lo que va del año, pues el cartón de 30 unidades, y de tamaño mediano, pasó de costar $3.95 en enero a $4.10 en septiembre, mientras que en diciembre ya alcanzó los $4.55, una subida bastante significativa para la economía del país.
En este punto, algunos de los productos que sí han presentado disminución son los tomates y las cebollas, pues los datos del MAG señalan que, por ejemplo, el manojo de 50 cebollas blancas pasó de valer $8.33 en enero a $9 en septiembre, mientras que en diciembre se colocó en los $5.33.
Por su parte, la caja de 325 tomates tuvo una rebaja de $2.25 con respecto al precio registrado en septiembre ($14.25), sin embargo, sigue siendo más alto que el costo que el MAG registró en enero.
De todos los productos utilizados en la alimentación, el azúcar es, probablemente, la que menos variaciones ha tenido en lo que va del año, pues se ha mantenido entre los $0.46 y los $0.49.