Momentos de angustia y de dolor vivieron los habitantes del caserío Las Lomitas en el municipio de Quelepa, San Miguel luego que corrió el rumor que cinco hombres residentes de este sector fallecieron en el centro penal la Esperanza (Mariona) capturados como parte del régimen de excepción.
El pasado lunes 17 de octubre, la familia de Alfredo José Gonzales Centeno de 25 años, quien se encuentra detenido, recibió una llamada donde les alertan qué el joven había fallecido junto a otros cuatro hombres de esa comunidad. Esa tarde la familia decidió contratar un vehículo para trasladarse hasta el Hospital Rosales en San Salvador.
La madre, Berta C. asegura que el vigilante en el turno de la noche le solicitó el DUI del joven y a su vez les confirmo que esté se encontraba entre los fallecidos, dicho procedimiento se repitió en cuatro ocasiones durante toda esa noche; fue hasta eso de las 10:00 de la mañana del siguiente día qué los vigilantes de turnos le aseguraron que Alfredo José no se estaba dentro de la morgue del hospital.
La familia decidió aclarar la incertidumbre y se apersonaron en el centro penal donde les manifestaron que Alfredo José está con vida; sin embargo, Berta no encuentra consuelo ya qué durante la presente semana no ha tenido la certeza de si su hijo aún vive o no.
“Yo estoy con ganas de ir a dejarle el paquete, pero voy hacer ese segundo gasto, no me pesa porque lo va a utilizar mi hijo, pero si voy y hago ese gasto innecesario y no este mi hijo” cuestiona Berta sentada en una silla plástica en las afueras de una pequeña casa de adobe y láminas.
Además de Berta otras tres madres de familia salieron del caserío rumbo a San Salvador para reclamar los cuerpos de sus familiares, pero estos no fueron entregados ya que al perecer todo se trataba de una confusión.
“Me siento afectada porque me tuvieron con el gran engaño, yo si pudiera hablar con Bukele le diera que tenga un poquito de justicia, conciencia porque a él no le gustaría que le hicieran lo mismo que nos está haciendo a las madres, si él (hijo) debe un delito que lo pague, pero yo deseo con todo mi corazón verlo personalmente” agrego Berta.
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La llamada
¿Quién alertó a los familiares? Es una pregunta que no tiene una sola respuesta, pero de todas las versiones la que más se escucha es que una mujer del sector viajó al centro penal para saber de un familiar, en el lugar se enteró de lo ocurrido y alertó a las familias. Según lo informado las muertes se dieron debido a una trifulca. Otros en el caserío se enteraron por redes sociales al ver la fotografía de Alfredo José con un listón negro.
“Tuvimos que buscar la funeraria, se llevó el servicio ya para traerlo y velarlo, no solo yo también las otras madres que andaban con la funeraria, ese fue otro gasto a parte del transporte… yo no he sentido calma porque esto duele”
BERTA C.
La velación
La noche del lunes un aproximado de cinco casas en el municipio de Quelepa se prepararon para recibir a sus difuntos, tenían pan dulce, café, sillas y un altar en cada una de las viviendas, pero los cuerpos no llegaron.
La hermana de uno de los jóvenes comentó que establecieron un acuerdo con la funeraria, “les vamos a dar un reconcomiendo por todo, aun no sé de cuánto va a ser, porque nosotros los velamos aun sin los cuerpos, y la funeraria los fue a buscar con el ataúd, pero por suerte no hubo entierro” dijo.
La supuesta muerte de los cinco hombres dentro del recinto penitenciario, causó impacto dentro de su comunidad.
"Yo lo vi en las redes sociales y después circuló el rumor por toda la comunidad, pero entendemos que es mentira, yo tengo varias noches de no poder dormir me puse bien mal porque son cipotes que uno los conoces desde pequeños y como sea no quisiera que algo malo les pasará" dijo una mujer que omitió su identidad.
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Una muerte
En el caserío ya lloran la muerte Jimmy Anthony Zelaya Centeno, de 30 años, “el próximo 7 de noviembre cumple los 40 días, pero tengo la esperanza que sé a dónde le voy a ir a dejar una florcita” comenta entre lágrimas Isabel C. madre del hombre, que también sufre por la captura de otro de sus hijos, Celvin Ivan.
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Isabel recibió una llamada telefónica del Hospital Rosales “llegamos en la tarde y regresamos de madrugada, lo velamos tres noches porque lo quería tener los últimos días en su casita… sellamos la caja porque no quería que la gente le estuviera viendo o tomándole fotos” confesó la apesarada madre.
A Jimmy se lo llevaron de casa, su madre asegura que él “no andaba en nada” que se mantenía en la vivienda debido a que padecía de insuficiencia renal, “estaba con tratamiento, a los cuatro meses de habérselo llevado, estuvo en el hospital dos meses, nunca lo puede ver solo el día que lo fui a traer” cuenta Isabel.
A Celvin Ivan, lo llegaron a traer a su casa, el hombre ya contaba con antecedentes por agrupaciones, su familia asegura que lo detuvieron en una velación, y estaba yendo a firmar a un juzgado como parte de las medidas sustitutivas a la detención, hasta el día que lo capturaron, nuevamente. Celvin no formaba parte de la lista de presuntos fallecidos.