El ex coronel Guillermo Alfredo Benavides Moreno brindó una declaración anticipada, como testigo de la Fiscalía General de la República, FGR, contra 11 personas acusadas de la masacre de seis sacerdotes jesuitas y dos colaboradoras perpetrada el 16 de noviembre de 1989.
La declaración anticipada fue brindada por el exconvicto ante el Juzgado 2° de Instrucción de San Salvador, informó la oficina de prensa de los juzgados, a través de Facebook.
Benavides Moreno fue condenado a 30 años de prisión, en la década de los 90, por su participación en la masacre, pero tras la aprobación de la Ley de Amnistía General fue liberado.
En 2016, tras la derogatoria de la ley fue recapturado, sin embargo, en noviembre del año pasado el Juzgado Cuarto de Vigilancia Penitenciaria y de Ejecución de la Pena de San Salvador le decretó la libertad condicional anticipada.
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En ese momento, el abogado defensor de Benavides, David Campos, declaró a Diario El Mundo que su defendido cumplía los requisitos para ese beneficio: tener más de 60 años de edad y haber cumplido un tercio de la pena, es decir, 10 años de los 30 de la condena total por su participación en la masacre.
Previamente, en noviembre de 2019, la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de El Salvador se negó a autorizarle la conmutación de la pena de prisión, luego en noviembre de 2021, los diputados de la Comisión de Justicia y Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa rechazaron la petición de indulto presentada a favor del coronel Guillermo Benavides.
Los acusados
En el proceso judicial actual la Fiscalía acusa a 11 personas por los delitos de asesinato, cómplice de asesinato, coautores de asesinato, actos de terrorismo, proposición y conspiración de terrorismo, encubrimiento y fraude procesal.
Los acusados son el expresidente Alfredo Félix Cristiani, el exdiputado Rodolfo Antonio Parker Soto y los exmilitares Juan Rafael Bustillo Toledo, Juan Orlando Zepeda Herrera, Rafael Humberto Larios López, Carlos Camilo Hernández Barahona, Nelson Iván López López, Joaquín Arnoldo Cerna Flores, Inocente Orlando Montano Morales, Óscar Alberto León Linares y Manuel Antonio Ermenegildo Rivas Mejía.
El hecho
La masacre fue perpetrada por un contingente del batallón Atlacatl, el cual irrumpió en la casa de los sacerdotes, anexa a la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), en medio de una gran ofensiva guerrillera sobre San Salvador, sus barrios populares y otras ciudades importantes del país.
Los militares ejecutaron a tiros a los jesuitas Ignacio Ellacuría, Amando López, Ignacio Martín Baró, Segundo Montes, Joaquín López y López, Juan Ramón Moreno, su asistente Elba Ramos y la hija de esta última, Celina Ramos.