A partir de la segunda semana de marzo ninguno de los meseros está autorizado para salir a los parqueos a conseguir clientes, porque esa dinámica fue calificada como hostigamiento o acosa a los turistas; la restricción fue dada por el Comité de Turismo de Playitas, del distrito de La Unión y los comerciantes del lugar, esto luego de las constantes quejas de los visitantes nacionales y extranjeros.
De acuerdo con los restauranteros, en Playitas nunca se acostumbraron a que los trabajadores salieran al área de los parqueos a buscar o pelearse por los clientes, cada uno de los visitantes decidían por su voluntad a donde consumir. Fue hasta después de la pandemia del COVID-19; que algunos empezaron a rebuscarse por clientes y lo hacían abordando a los turistas.
Algunos comerciantes aseguran que debido a ese “acoso de meseros”, se registraron algunas reducciones en las ventas debido a que los turistas no querían llegar a la playa porque se sentían presionados por los trabajadores que entre gritos o jaloneos se los llevaban para los negocios.
Maura Molina, presidenta del Comité de Turismo de Playitas, manifestó que ya contaban con muchas quejas de los turistas que no querían llegar a Playitas porque no les gustaba que les salían todos los meseros al parqueo, “a veces las personas ni se habían bajado del carro cuando los meseros ya los estaban como acosándolos, y eso les generaba intranquilidad”.

Son alrededor de 10 restaurantes del lugar, y cada uno cuenta con dos meseros, es decir que entre 15 a 20 meseros salían al encuentro de los visitantes, “los clientes no solo se quejaban con nosotros, también se lo hicieron ver al Ministerio de Turismo, incluso, hay personas que se quejaban que algún mesero hasta le escupió la cara”, agregó Molina.
Según Molina, para no continuar con algunas pérdidas en el rubro, tomaron la decisión de reunirse entre todos los dueños de los negocios y ponerse de acuerdo, “ya habíamos tratado de corregir ese problema pero no se pudo porque los trabajadores lo volvieron a hacer; pero hemos llegado al acuerdo que como propietarios le vamos a prohibir a los meseros a dejar esas prácticas”.
Karen Fermán, dueña de restaurante, manifestó que tiene más de 25 años de tener el negocio, y que nunca en el lugar se tenía esa mala práctica de las meseras, “queremos mejorar para que el turista se sienta cómodo y sea libre a donde irse a comer o descansar; esperamos que todos cumplamos con esa decisión de no permitir que los trabajadores salgan a buscar los clientes al parqueo”.

Rosmery Meléndez, miembro del comité “hace dos a tres años se viene registrando esa situación que hemos notado que nos ha afectado porque al turista no le gustaba y dejaba de venir, lo que queremos es que los visitantes se sientan libres y no cuestionados”.
“Estábamos viendo que el turista ya no estaba viniendo a Playita, se iba para las otras cercanas, y esa era la razón, y eso no estaba afectando. Esperamos que noten el cambio ya desde este mes de marzo”, agregó Meléndez.
Algunos turistas como Miriam Acosta, dice que Playitas es un sitio encantador por su playa y su gastronomía, pero que siempre que ha visitado el lugar se ha encontrado con algunos problemas, “cuando uno llega ya tienen encima a los meseros gritándole que venga para este lugar, que el otro es el mejor; y eso a uno lo estresa y es el cliente quien decide a donde consumir”.
Acosta espera que el sector se ordene. Además, que resuelvan los problemas de contaminación que está a la vista con las descargas de algunas aguas sucias que desembocan al mar.