Lo que empezó como un día para pasarlo en familia y llenó de diversión acabó en tragedia ya que un joven murió al tirarse de un deslizadero, en un turicentro de Santa Ana.
La víctima fue identificada como Cristofer Steven C., quien había viajado hasta El Salvador a vacacionar junto a sus cercanos. Según conocidos, él vivía en el estado Seattle, de Estados Unidos. Su edad no fue confirmada, pero se dijo que era un joven.
Sobre cómo ocurrió el incidente, se conoció que, aparentemente, él se deslizó de un tobogán y al caer, su cabeza habría pegado con unas gradas que están dentro de la piscina.
La víctima quedó inconsciente y al tratar de auxiliarlo ya no respondió, a pesar que se le práctico reanimación cardiopulmonar.
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Algunos turistas que ya han llegado al balneario creen que el no conocer a dónde se iba a tirar y la forma en que lo hizo (parado o acostado) pudo influir en el desenlace trágico.
“Ese tobogán está de años, lastimosamente la persona que falleció nunca se percató que ahí no era algo seguro para deslizarse”, lamentó una residente.
Agregó que “lo mismo hubiese pasado si se lanza a la piscina sin saber cómo es el fondo”. Debido a que el sector dónde fue inspeccionado el cuerpo por las autoridades estaba lejos de la salida, los socorristas tuvieron que improvisar una balsa y llevarlo al otro extremo.
Las autoridades no dieron detalles de lo que provocó su muerte, si fue por el fuerte golpe o se debió a una asfixia por inmersión.