El Tribunal Supremo Electoral (TSE) no genera confianza de cara a la sociedad salvadoreña en la ejecución de los comicios para las cuatro elecciones de febrero y marzo, así reveló la Encuesta de Humor Social y Político de Observa El Salvador 2024.
Al preguntarle a la población sobre qué tanto confía en el trabajo del Tribunal respecto a las elecciones presidenciales y a la Asamblea Legislativa en 2024, un 45.9% afirmó que poco y un 14.8% respondió que nada.
Magistrado Guillermo Wellman: “Como Tribunal Supremo Electoral, nunca hemos sido supremos”
Un 34.6% respondió que mucho y el porcentaje restante no supo o no respondió.
El Tribunal Supremo Electoral fue fuertemente criticado por académicos, expertos electorales y por la sociedad civil al avalar la candidatura del presidente de la República, Nayib Bukele, a quien la constitución le prohibía inscribirse para correr a una posible reelección.
Los partidos políticos también han señalado que el Tribunal no sanciona a quienes ejercen violencia política, incluso están inscritos como candidatos a cargos públicos.
Otro fenómeno electoral que a la fecha sigue sin sancionar el TSE son los casos de campaña adelantada, de la que reconoce que estudió de oficio 25 casos y que posteriormente evidenció campaña ilegal de candidaturas a concejos municipales, pero no hay imposición de sanciones.
El Tribunal, que constitucionalmente es la máxima autoridad en materia electoral, permite que instituciones de gobierno y funcionarios públicos anuncien obras de infraestructura y mantenimiento, aún cuando desde el 4 de enero está prohibida su publicación. La ley electoral establece que 30 días antes de la realización de las elecciones nadie podrá publicitar o anunciar obras estatales, sin embargo, ante su incumplimiento, el Tribunal continúa guardando silencio.
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“¿Qué tanto confía en el Tribunal Supremo Electoral respecto al proceso de implementación y transmisión de datos del voto electrónico en el exterior?”, contempló la encuesta, obteniendo como resultado baja desconfianza en el proceso electoral.
El 44.4% de las y los encuestados expresó poca confianza y el 19.7% reflejó no confiar en lo absoluto. Mientras que el 30% sí confía mucho y el restante 5% no respondió.
No es la primera vez que aparecen datos que muestran desconfianza. Recientemente, la encuesta del Instituto Universitario de Opinión Pública reflejó un alto nivel de desconfianza en el proceso electoral de este año con un total del 42.4%.
Un buen número de personas temía de fraude electoral, ya sea por ser “lo habitual” de cada elección, por el control de todas las instituciones públicas de gobierno o por otros motivos.