Tres familias fueron evacuadas de forma preventiva por personal de Protección Civil y de la Alcaldía Municipal de Cacaopera este martes, debido a que sus casas están construidas en una zona de riesgo por derrumbes, en el marco de la emergencia nacional por la Tormenta Tropical Pilar.
Las autoridades señalaron que las tres viviendas se encuentran ubicadas en el caserío Macuilis del municipio de Cacaopera, departamento de Morazán, y tras una inspección se procedió a la evacuación de las personas, entre ellos un menor y un adulto mayor, hacia una vivienda cercana a un kilómetro de distancia.
Por otra parte, el alcalde municipal Lorenzo Argueta informó que también se realizaron inspecciones en el cantón Guachipilín, el caserío Naranjero del cantón La Estancia, que son zonas identificadas en el mapa de riesgo por derrumbes y crecidas por el río Torola.
Para el monitoreo a lo largo y ancho del territorio, el edil indicó que es importante la labor que desempeñan los líderes comunales de Protección Civil, pues son ellos quienes se mantienen en vigilancia desde las comunidades y en constante comunicación con las autoridades a través de informes emitidos.
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Además, las intensas e incesantes lluvias en Morazán están dejando algunas afectaciones a su paso, una de ellas es el atascamiento de vehículos en el tramo de la carretera que de Perquín conduce hacia la frontera de Honduras, en el sector conocido como Llano del Muerto, en territorio salvadoreño.
Denunciantes afirman que las malas condiciones en las que se encuentra la calle han ocasionado la acumulación de fango en la zona debido a que es de tierra, más la gran cantidad de agua lluvia que cae desde la tarde del lunes, es lo que ha dejado varios vehículos atascados durante horas.
El estado actual de la vía de acceso complica totalmente el paso, según conductores. Las personas se deben bajar de los vehículos y empujar o colocar piedras para lograr salir y desatascar los automotores pegados en el lodo.
Expresaron que tal situación lamentablemente se repite cada año, lo que afecta a personas que se movilizan con destino a San Francisco Gotera o San Miguel pese al clima, por la accesibilidad de alimento y comercio.
Recientemente se dio a conocer el caso mediante un video donde se observa a un autobús que hace su recorrido desde Marcala, departamento de La Paz, Honduras, hacia San Miguel, ya en El Salvador, en medio del fango, siendo este uno de los pocos medios de transporte público con los que cuenta la población de esos sectores fronterizos.