Los habitantes de la comunidad Chilama I en La Libertad estaban ayer a la expectativa de lo que la tormenta Pilar pueda ocasionar en sus casas, ya que viven a orillas del río Chilama.
Si bien dicen que están informados de los pronósticos por las lluvias, señalan que no existe un protocolo en la comunidad para saber dónde refugiarse en caso de evacuación. Según un miembro de la directiva, son 96 familias las que viven en Las Chilamas.
Los vecinos dicen no haber recibido visitas de las autoridades municipales para indicarles sobre una posible evacuación, pese a que ese lugar se ha inundado en varias ocasiones cuando el río se desborda.
“El peligro aquí es cuando el río crece demasiado y se desborda. Aquí no nos han dicho nada, solo hablan de evacuación cuando ven que el río está a punto de desbordarse. Cada vez que se inunda, perdemos todo”, aseguró Consuelo Molina Castillo, quien tiene 53 años de edad, de los cuales ha vivido 19 en la comunidad.
Ella mencionó que no todos los inviernos son iguales, pero el peligro aumenta cuando el río, que pasa cerca de su casa, se desborda.
Por esa razón, y ante la llegada de Pilar, Molina había colgado su cama de madera en el techo de su casa para intentar protegerla si el río se mete en su hogar, pues recuerda que la última vez que su casa quedó bajo agua perdió trastes, un televisor, la refrigeradora, colchones, redes para pescar y ropa.
En cambio, Elena Maribel Guerra, de 41 años, estaba más confiada con el clima y esperaba que la ropa que había lavado se secara al menos con el viento, ya que el sol aparecía por escasos minutos.
A pesar de conocer la situación y de sufrir en varias ocasiones por la inundación, Guerra dijo que no había preparado maletas ni buscado proteger sus pertenencias, como medidas de precaución. “Esperamos que no suceda nada, mientras estaremos pendientes de las noticias y del nivel del río”, explicó.
Para Felicita Bonilla, que tiene más de 25 años viviendo en la misma comunidad, es preocupante que las autoridades municipales no les hayan informado ningún plan de evacuación, aunque ella aseguró que no dejaría su casa por miedo a que le roben sus pertenencias.