Las clases en los centros educativos a nivel nacional han sido suspendidas para este lunes, anunció el Gobierno, debido a los estragos provocados por la tormenta Bonnie, la cual sigue afectando el territorio nacional con fuertes lluvias.
“Se suspenden clases en todo el territorio nacional para mañana lunes”, anunció el presidente Nayib Bukele, a través de su cuenta de Twitter.
Para el martes, indicó el mandatario, las autoridades evaluarán el regreso a las instituciones educativas dependiendo de la evolución de las lluvias, ante la amenaza también de una nueva onda tropical.
El ministro de Educación, Mauricio Pineda, respondió al tuit del presidente Bukele instando a Directores Departamentales de Educación a acatar la medida. La suspensión de clases aplica también para universidades, así como para docentes y personal administrativo de centros educativos, dijo el funcionario.
La tormenta tropical Bonnie ha causado caos e inundaciones en diferentes zonas del país y en algunos hospitales como el Rosales desde el sábado por la noche. Dos personas han muerto al ser arrastradas por corrientes de agua cerca de sus viviendas.
Carolina Gaitán, de 24 años, murió el sábado por la noche arrastrada por una corriente en la colonia Santa María de San Martín. Su cuerpo fue succionado por el drenaje que está a un costado de su vivienda.
En otro caso, Emiliano Gutiérrez, de 50 años, murió tras ser arrastrado por la repunta de un río. El hecho ocurrió en el caserío Los Vega, cantón Chilata, municipio de San Julián, en Sonsonate.
Si bien la tormenta Bonnie se ha desplazado, el Ministerio de Medio Ambiente informó este domingo que se prevé que continúe afectando el territorio salvadoreño.
“La Tormenta Bonnie ya avanzó, este sistema ya se desplazó hacia el Océano Pacífico y seguirá desplazándose al oeste, pero no significa que no vamos a seguir teniendo lluvias, principalmente durante la tarde y noche”, indicó el ministro de Medio Ambiente, Fernando López.
El funcionario recordó a la población acatar recomendaciones de seguridad debido a la saturación de agua: "Los suelos están cargados de humedad y hemos tenido un importante componente de viento, registramos ráfagas hasta de 45 kilómetros por hora en Santa Tecla.
Habitantes de algunas de las zonas más afectadas por estas lluvias, como la comunidad Darío González, en San Salvador, han reclamado a las autoridades por proyectos que les den una solución definitiva al problema de las inundaciones.
En esa comunidad de la capital, las fuertes corrientes de las aguas del río Acelhuate anegaron las viviendas. Perdieron enseres, electrodomésticos, muebles, ropa. Una realidad que se repite cada vez que llueve. "No es vida estar viviendo así", dijo Rosa Claribel Vásquez, de 29 años, habitante de la comunidad Darío González, en San Salvador.