Este 30 de junio se cumplen dos años de que la Comisión Ejecutiva del Río Lempa (CEL) firmó contrato con una empresa mexicana para que ejecutara 19 obras de beneficio social en varias comunidades de los distritos (antes municipios) Carolina, San Luis de la Reina y San Antonio, del departamento de San Miguel, que resultaron afectadas por la construcción de la Presa El Chaparral, renombradas como 3 de Febrero en el primer período presidencial de Nayib Bukele.
Aunque el contrato indicaba que las obras tenían que estar terminadas en un plazo de 210 días, es decir, siete meses, ninguna de las 19 obras ha sido iniciada, y según afirman vecinos del cantón San Antonio Las Iglesias (en San Luis de la Reina), no ven indicios de que la CEL cumpla el compromisos firmados con las comunidades.
“La construcción de las obras traerá beneficios a las familias que residen en estas comunidades, mejorando su calidad de vida, así mismo, fortalecerá las buenas relaciones que se han construido entre la Comisión y los habitantes de la localidad” reza parte del acta de la Sesión No. 3984, del 11 de marzo de 2002, de la CEL.
El miércoles anterior, miembros de la asociación de desarrollo comunal y de la junta administradora del agua del cantón San Antonio Las Iglesias expresaron su inconformidad por el incumplimiento en la construcción de tres obras, parte de las 19, que CEL les prometió.
Ese cantón sería beneficiado con la construcción de una aula para parvularia, un salón de usos múltiples y varias paradas de buses.
En el cantón El Junquillo, del mismo distrito, también prometieron construir una aula para parvularia, anexa al centro escolar del lugar.
Pero de todo eso no hay nada. Lugareños afirman que en lugar de beneficios, la CEL les ha ocasionado problemas porque en el lugar donde sería construido el salón de usos múltiples, la empresa mexicana Contratista General de América Latina (CGAL), solo llegó un par de días, a colocar un rótulo, delimitó el lugar de la construcción con una maya de plástico roja y abrió una profunda zanja que en época lluviosa se convierte en criadero de zancudos.
Eusebio Sorto, presidente de la adesco de San Antonio, recuerda que a principios del 2002, CEL les informó que el dinero para las obras ya estaba y que solo esperaban que la comunidad tuviera el terreno disponible para comenzar.
19 OBRAS
de beneficio social prometió la CEL a comunidades de los distritos Carolina, San Luis de la Reina y Villa San Antonio, todos de San Miguel. El 30 de junio de 2022 firmó contrato con una empresa mexicana que abandonó el proyecto sin hacer nada a pesar de que le adelantaron varios millones de dólares.
La carrera comenzó. El terreno que hallaron disponible lo comprarían en $40,000, por lo que solicitaron ayuda a la alcaldía, quien les proveyó de $20,000, la junta administradora del agua del cantón les colaboró con otros $10,000 y para reunir los otros $10, tuvieron que hacer actividades de recaudación de fondos y pedir ayuda a lugareños residentes en el exterior.
De 210 a 730 días y sin nada
En cuanto a las paradas de buses, CGAL derribó las que estaban, hizo algunas zanjas pero hasta allí dejaron. En marzo de 2023, esa empresa a la que CEL le había dado el contrato por más de $13 millones, de lo cual le había adelantado una gran parte, se fue del país.
A la fecha cuando se supo que CGAL había abandonado los contratos, las obras ya tenían que estar terminadas, pues los 210 vencían en enero de 2023.
Según un reporte de la revista Voz Pública, del 28 de abril de 2023, la CEL pidió la terminación “amigable” de los contratos por los atrasos en la ejecución y prefirió comenzar de nuevo.
En cuanto a la cantidad que el gobierno le entregó como adelanto, en mayo del año pasado, CGAL solo indicó a este medio que fue lo estipulado en los contratos.
En el segundo semestre de 2023, la CEL asignó, por contratación directa tanto la construcción de los dos puentes sobre el embalse como las 19 obras sociales.
Miembros de directivas de desarrollo comunal indicaron que a finales del 2023, funcionarios de CEL asignados a la zona, les prometieron que en enero comenzaría la construcción tanto de los puentes como de las 19 obras en los tres municipios afectados por el embalse.
Sin embargo, otra vez volvieron a ser engañados porque ya transcurrieron seis meses desde que les dieron un poco de esperanza pero hasta la fecha no han llegado a inspeccionar la zona.
“Platiqué con el ingeniero y él me dijo que los fondos ya habían sido liberados y que en enero de este año empezaban estas obras, pero ya tenemos seis meses de atraso. En enero de 2022 dijeron que en 210 debería estar terminado pero llevamos ya dos años esperando”.
EUSEBIO SORTO, PRESIDENTE ADESCO, CANTÓN SAN ANTONIO LAS IGLESIAS
“El problema es que cinco años después de todos esos acuerdos con CEL no se ha visto nada claro. En diciembre nos dijeron que los fondos para la construcción de esas obras ya habían sido liberados y que en enero le entraban al salón de usos múltiples y unas cuantas champas que fueron demolidas por la CEL y que era donde la gente se protegía cuando salían a esperar el transporte”, dijo el presidente de la Adesco.
“Nosotros pensamos que esto (construcción de salón de usos múltiples) en dos años ya iba a estar construido pero lo que ve es lo que hay”, afirmó Sorto, señalando el terreno donde sería construido el salón de usos múltiples, donde ha crecido monte y matorrales y está anegado de agua lluvia.
“Platiqué con el ingeniero y él me dijo que los fondos ya habían sido liberados y que en enero de este año empezaban estas obras, pero ya tenemos seis meses de atraso. En enero de 2022 dijeron que en 210 debería estar terminado pero llevamos ya dos años esperando”, afirmó Sorto.
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Desde diciembre anterior, afirman los afectados por el incumplimiento de la autónoma, los funcionarios de la misma no les han explicado sobre el nuevo retraso.
Temor a la malaria
“Todos creíamos que con la construcción de la obra de CEL la comunidad iba a ser beneficiada pero en vez de mejorar lo que han hecho es dejar focos de infecciones. Nosotros esperábamos otra situación”, dijo Alexis Sorto, presidente de la junta del agua del cantón San Antonio.
Sorto también afirmó que una institución de salud, de la cual no quiso dar el nombre, les ha advertido que en la zona han encontrado el zancudo que transmite la malaria y que les preocupa que todas las zanjas que abrieron para supuestamente iniciar las obras sociales más el embalse puedan servir de criaderos de zancudo.
Los directivos comunales afirmaron que luego del llenado del embalse han percibido que la cantidad de zancudos se ha disparado enormemente.
Les preocupa, dijeron, que como en Honduras se registran casos de malaria, de repente, con tanto zancudo, haya algún brote en las comunidades aledañas al embalse.
Una publicación del periódico hondureño, El Heraldo, de principios de mayo de 2023, indica que los casos de malaria en Honduras han ido en aumento desde 2019, pero que se dispararon en 2022, cuando registraron 3,501 infectados, en tanto que en 2021, las autoridades de salud de ese país registraron 577 casos.
El 25 de febrero de 2021, El Salvador fue el primer país de Centroamérica en recibir la certificación de eliminación de la malaria otorgada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Calles en mal estado
Los vecinos de las comunidades vecinas al embalse también se quejaron de que la autónoma no da el mantenimiento adecuado a las calles aledañas a la presa, a pesar de que cuando iniciaron con el proyecto, en las reuniones que personal de CEL tenía con las comunidades, se comprometieron a dar el mantenimiento respectivo. Los afectados hicieron énfasis en la calle conocida como “Alterna”, que es la que se utiliza cuando la calle principal es bloqueada por algún derrumbe, derribo de árbol u otra circunstancia.
730 DIAS
Este 30 de junio se cumplen dos años desde que CEL adjudicó la construcción de 19 obras de beneficio social en comunidades afectadas por la construcción de la Presa El Chaparral. El contrato estipulaba que era para 201 días, pero hasta la fecha ninguna de las obras prometidas ha sido entregada.
Humberto Tellez, miembro de la adesco de San Antonio, le recordó a CEL el compromiso que adquirió de darle mantenimiento cuanta vez fuera necesario.
Sin embargo, según vecinos, la última vez que recuerdan que le echaron balasto fue hace cinco años. Luego no han vuelto a darle mantenimiento, dijeron.
El miércoles anterior, El Diario de Hoy pudo comprobar el mal estado en que se encuentran las calles aledañas y de acceso a la central hidroeléctrica que también son usadas por vehículos livianos y pesados de la misma autónoma.