El sarampión es una enfermedad muy contagiosa que afecta sobre todo a los niños menores de 5 años, y se transmite por secreciones de procedentes de la nariz, boca y faringe de las personas infectadas.
La alerta de los especialistas locales y extranjeros se debe al aumento de casos registrados en los últimos meses en distintos países del mundo.
En abril de 2022, los organismos informaron que se habían producido 21 brotes de sarampión de gran magnitud y gravedad en todo el mundo, ocurrió en los últimos 12 meses, de acuerdo a cifras conjuntas de la OMS y UNICEF.
La mayoría de los casos de sarampión se registraron en África y en la región del Mediterráneo oriental.
Te puede interesar: Hay escasez de vacuna contra la poliomielitis en unidades de salud
En detalle los países con los mayores brotes de sarampión desde el año pasado son Somalia, Yemen, Nigeria, Afganistán y Etiopía.
La OMS y UNICEF estima que la insuficiencia de la cobertura de la vacuna contra el sarampión es la principal razón de los brotes, dondequiera que se produzcan.
¿Cuáles son las afectación por el sarampión?
En casos graves puede causar complicaciones, tales como: ceguera, encefalitis, diarrea intensa, infecciones del oído y neumonía, sobre todo en niños malnutridos y pacientes inmunodeprimidos.
Los síntomas iniciales, que suelen aparecer entre 8 y 12 días después de la infección, consisten: en fiebre alta, secreción nasal, inyección conjuntival (ojos rojos) y pequeñas manchas blancas en la cara interna de la mejilla.
Varios días después aparece una especie de sarpullido que comienza en la cara y cuello, y se va extendiendo gradualmente al resto del cuerpo.
No hay tratamiento específico para el sarampión, y la mayoría de los pacientes se recuperan en 2 o 3 semanas.
Según la OMS y UNICEF la cobertura igual o superior al 95% con dos dosis de la vacuna segura y eficaz contra el sarampión puede proteger a los niños contra la enfermedad. Sin embargo, las interrupciones relacionadas con la pandemia de COVID-19 han retrasado la aplicación de la vacuna.