Nueve voluntarios del Cuerpo de Paz reafirmaron su compromiso de servicio este viernes durante una ceremonia realizada en las instalaciones de la Embajada de los Estados Unidos en El Salvador. El evento marca el reinicio formal de las operaciones de esa organización estadounidense, luego de su retiro en 2016 a causa del alto índice de criminalidad.
“Es realmente un gran honor estar de regreso en Salvador en una ocasión tan trascendental, para celebrar el espíritu de profunda confianza y respeto mutuo que define la relación de más de medio siglo entre el Cuerpo de Paz y el pueblo de El Salvador. Es difícil creer que fue hace poco más de un año que nos unimos para firmar el acuerdo de bienvenida a los voluntarios del Cuerpo de Paz de regreso” manifestó Carol Spahn, directora Global del Cuerpo de Paz.
Los voluntarios que trabajarán en el país han prestado servicio durante dos años en el Cuerpo de Paz en países de América Latina y África, entre ellos: Belice, Colombia, México, Costa Rica y Senegal, entre otros.
“Ustedes ya han hecho contribuciones increíbles en su país de servicio, pero hoy comienzan un nuevo capítulo. Están abriendo un camino que dará forma al futuro del Cuerpo de Paz en El Salvador en los años venideros”, expresó Spahn.
La directora del Cuerpo de Paz relató que en los dos años anteriores los voluntarios han enfrentado desafíos como abordar las disparidades de género en la costa colombiana, enfrentar la escasez de agua, enseñar educación física en escuelas de escasos recursos en Bolivia y Belice o adaptarse a los cambios debido al brote de ébola en Uganda.
“Cada uno de ustedes ha enfrentado desafíos increíbles. Han sido puestos a prueba y desafiados, de manera que los han hecho más resilientes, más adaptables, pero lo más importante, más conectados con las comunidades con las que vivieron y sirvieron”, manifestó la directora del Cuerpo de Paz.
Los voluntarios se comprometieron a trabajar junto a los miembros de las comunidades donde estarán asignados para promover el desarrollo sostenible y fortalecer los lazos de cooperación.
Joseph Bleyer, uno de los voluntarios, explicó que tienen muchas habilidades para integrarse en nuevas comunidades con culturas diferentes a las suyas, además tienen la capacidad de ayudar en el desarrollo económico de las mismas.
“Venimos acá con el entendimiento de que vamos a tener retos, pero con el conocimiento necesario para enfrentarlos con la ayuda de nuestra contrapartes, comunidades y familias anfitrionas”, destacó Bleyer.
“Unos han sido maestros de Inglés y otros han ayudado al desarrollo económico de las comunidades, aprendimos muchas habilidades sociales que pondremos usar en las comunidades de acá en El Salvador” agregó.
El ministro de Educación de El Salvador, José Mauricio Pineda, mostró su agradecimiento a los voluntarios por la decisión de colaborar en la construcción de un futuro para la juventud salvadoreña.
“El altruismo de cientos de voluntarios que trabajaban en más de 60 naciones realmente nos inspira, su compromiso con el bienestar, la paz y el progreso es más que encomiable, por ello estamos inmensamente agradecidos por su generosidad”, declaró Pineda.
Pineda aseguró que la llegada del Cuerpo de Paz en 1962 dejó “una huella indeleble en la vida de muchas personas en situaciones de vulnerabilidad. “Hoy su regreso representa una nueva apertura para reavivar ese espíritu de cooperación y contribuir en el desarrollo de nuestros jóvenes” manifestó el ministro de Educación.
Pineda se comprometió a colaborar en cada una de las iniciativas de los voluntarios, brindando el acompañamiento necesario. “Juntos podemos fomentar un entorno en donde cada joven, independiente de su origen o su condición, pueda encontrar su voz y contribuir al bienestar de nuestra sociedad”, expresó.
William Duncan, embajador de Estados Unidos en El Salvador, explicó que en 2019 comenzó el proceso para traer de vuelta a los voluntarios, pero hubo retrasos debido a la pandemia del Covid-19, por lo que fue hasta el 7 de septiembre del año pasado que se firmó el acuerdo bilateral para la llegada de los nueve voluntarios.
“Hoy cumplimos la promesa de este acuerdo, con la llegada de nueve voluntarios, desde su creación el Cuerpo de Paz ha sido un símbolo de amistad y cooperación entre naciones. Hoy celebramos el compromiso de estos voluntarios que han elegido dedicar su tiempo y energía al servir en comunidades lejos de sus propios hogares” declaró el embajador.
Duncan recordó que desde 1962, la primera vez que llegó la agencia federal al país, más de 2, 300 voluntarios han servido en El Salvador cuyas contribuciones han dejado su huella en el desarrollo y bienestar de las comunidades a nivel nacional.
“Su dedicación y arduo trabajo son verdaderamente inspiradores, están aquí para promover la paz mundial, la amistad a través del desarrollo comunitario y entendimiento intercultural. Sus esfuerzos al trabajar juntos a las comunidades locales, compartir conocimientos y construir relaciones duraderas son invaluables”, dijo el embajador.