Daniel Zovatto, director regional para América Latina del Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral (IDEA), ha señalado que la elección continua, así como la búsqueda de la reelección en El Salvador son “totalmente inconstitucionales”.
Durante una entrevista con la periodista Carmen Aristegui, para la cadena CNN, el experto en democracia y temas electorales resaltó que la popularidad no puede ser un camino a un desmantelamiento de la democracia.
“La elección de Bukele de febrero y la búsqueda de la reelección es totalmente inconstitucional; la Constitución salvadoreña dice expresamente que no puede haber elección consecutiva”, señaló.
Zovatto puntualizó: “La anterior jurisprudencia de la anterior Corte de lo Constitucional era muy clara a ese aspecto”.
El representante de IDEA Internacional, una organización intergubernamental que promueve e impulsa la democracia alrededor del mundo, no duda que Bukele puede ganar la reelección “de manera fácil y con amplio apoyo popular”, pero opina que luego seguirá presentándose como un presidente democrático.
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En septiembre pasado, Zovatto expuso, durante un foro global, al gobierno de Nayib Bukele como ejemplo de autoritarismo y “peligro para la democracia” en la región.
“Cada foto y video que saca no son improvisados, está planificado al mínimo detalle… cada tatuaje, cada acto en que se lleva (a detenidos) por la nuca, en que se les somete, la megacárcel que ha construido… ahí hay un elemento peligrosísimo” para la democracia y los derechos humanos, expuso en esa ocasión.
Otros actores internacionales también han mostrado su preocupación ante actos que consideran ponen en peligro la pluralidad y el Estado de Derecho.
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La Oficina en Washington de Asuntos Latinoamericanos (WOLA) dijo recientemente que los salvadoreños irán a las urnas (en 2024) para elegir a presidente y autoridades de la Asamblea Legislativas y concejos municipales “en un contexto de deterioro del Estado de Derecho” y “violaciones a derechos humanos donde es imperativo garantizar elecciones libres, transparentes y justas”. Asimismo, señaló que las autoridades deben cumplir con los estándares internacionales en derechos humanos aplicables al proceso electoral.
WOLA añade que la popularidad del actual presidente no justifica que se altere el orden constitucional.
En la misma línea, expertos en el país han señalado que el actual gobierno usa la herramienta del miedo como un mecanismo para perpetrarse en el poder, herramienta de la cual, consideran, emanan las políticas públicas de seguridad, como el régimen de excepción, medida ampliamente denunciada por los graves atropellos a derechos humanos desde su vigencia.