El gobierno salvadoreño debería estar alerta ante las decisiones migratorias que tomará Donald Trump en su regreso a la Presidencia de los Estados Unidos. El mandatario estadounidense advirtió en su campaña de deportaciones masivas, por tanto, las voces expertas indican que debiera crearse mejores condiciones en el país.
De hecho, uno de sus primeros anuncios en su primer discurso de toma de posesión este lunes fue declarar estado de emergencia en la frontera Sur estadounidense y reforzar la devolución de inmigrantes indocumentados.
Las voces expertas consultadas por El Diario de Hoy prevén cambios que deberán tomarse en la conducción del país, a partir de la toma de posesión de Trump.
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El historiador salvadoreño Carlos Cañas Dinarte destacó que Estados Unidos tiene puesto el ojo en frenar la migración sin importar el estado en que estén los países de los cuales proceden los migrantes.
“La amenaza de deportaciones masivas debería ser algo que preocupe al gobierno salvadoreño, porque estamos hablando de más de 260,000 salvadoreños en la posibilidad de ser deportados de inmediato por el nuevo gobierno, miles de salvadoreños regresarían a un país en donde no hay fuentes de trabajo, la situación de vida está carísima y mucha de esta gente se fue hace mucho tiempo”, advirtió Dinarte.
Asimismo, puntualizó en que la zozobra sobre si Trump reactivará o cancelará el TPS no es buena para El Salvador.
Dinarte aborda otros temas de interés para ambos países, específicamente, sobre la amistad con China.
“Veremos una situación tirante con los Estados Unidos, Trump llega a decir ‘o somos nosotros o son los Chinos’, al gobierno de El Salvador le va a tocar tomar una decisión, o se vuelca completamente con Trump y sus delirios o tiene que aceptar que está del lado chino; pero no va a poder jugar a doble banda como ha estado haciendo hasta este momento”, consideró.
Cañas Dinarte valora que con Trump en el poder El Salvador deberá tomar un posicionamiento respecto a la propuesta del estadounidense de anexarse a Groenlandia o de ocupar de nuevo el Canal de Panamá.
Asimismo, señaló que El Salvador ha estado jugando un papel bastante tibio al no declararse en contra de la invasión de Rusia contra Ucrania, tema también de interés para los Estados Unidos.
Por su parte, el analista político Carlos Araujo también advirtió preocupación sobre el tema migratorio.
“Un retorno masivo de salvadoreños ilegales generaría un caos aquí y los programas que obligan a los países de la región a detener a los migrantes, también limitaría las opciones de alivio económico aquí; eso porque el país sigue sin brindar alternativas de alivio económico”, consideró.
El politólogo Napoleón Cambios habló de cambios entre las relaciones entre El Salvador y Estados Unidos, esto a partir de que habrá preeminencia del señalamiento de Trump contra Bukele cuando asumió la candidatura del Partido Republicano al imputarle el envío a EE.UU. de los líderes de las maras, en vez de atender las solicitudes de extradición de esos individuos que guardaban prisión por sentencias en firmes en El Salvador y fueron excarcelados bajo el gobierno de Bukele apareciendo en Guatemala, México y hasta en territorio estadounidense.
Por otra parte considera que “no debemos ingresarle más cuestionamientos a esa clara brecha en negativo para Bukele desde las decisiones de Trump”, sino que hoy día se debe pensar en lo que se le viene a Bukele con Trump.
“La maquinaria de propaganda del régimen de Bukele había hecho creer que Matt Gaetz, Trump Jr., Marco Rubio y otros, le habían allanado el camino a Bukele aproximándolo a Trump, pero nada era cierto”, consideró Campos.
“Todo queda en un vilo para Bukele, hasta que Trump ejecute la siguiente decisión bilateral y específica sobre El Salvador, que muy bien pudiera ir de la mano con el avance de los juicios contra la ranfla MS-13 en Nueva York y Nueva Jersey, porque constituyen un hilo razonable para la política exterior de Trump con El Salvador”, añade.
El historiador salvadoreño Héctor Lindo señaló que tiene varias preocupaciones sobre las relaciones de El Salvador con Estados Unidos durante la nueva administración Trump.
"Mi principal inquietud es que la presencia de Trump, con su conocido desprecio por las normas, otorgue un aire de legitimidad a las peores inclinaciones del gobierno de Bukele: la falta de respeto a la Constitución, a los derechos humanos y a la verdad. Es más, la presencia de Trump en Estados Unidos puede tener resultados similares a lo que ocurrió durante el primer tercio del siglo XX, cuando la presencia de gobiernos hostiles a los principios democráticos en Europa y otros países de Latinoamérica facilitó la existencia de dictaduras en Centroamérica", advirtió el experto.
Además, no cree que en el futuro el país vea muchos ejemplos del uso de la lista Engel para censurar a autoridades corruptas.
Lindo sostiene que, por otro lado, las acciones de la administración Trump con respecto a la política migratoria y al crimen organizado (sobre todo los juicios de pandilleros) tienen el potencial de crear problemas para El Salvador.
Diputados de la Asamblea Legislativa también tienen sus posturas sobre lo que vaya a a ocurrir tras la investidura de este lunes.
Francisco Lira, de ARENA, advierte que en el tema migratorio se afectaría a muchos salvadoreños que buscan un futuro mejor en Estados Unidos, huyendo de la falta de oportunidades en su país.
Para ello propone que El Salvador fomente la creación de empleos para minimizar así el éxodo de migrantes.
“A pesar de las tensiones en temas como la inmigración, las relaciones diplomáticas entre ambos países podrían mantenerse. Los acuerdos de libre comercio existentes probablemente seguirán vigentes, dado que son fundamentales para mantener empleos en El Salvador. Además, es posible que continúen los apoyos para proyectos de desarrollo sostenible enfocados en el medio ambiente y la sostenibilidad”, se refirió sobre el tema diplomático.
Sin embargo, en su discurso Trump también adelantó que aplicará más aranceles a países extranjeros, en un servicio de impuesto sobre la renta externo.
Sobre el tema de seguridad, Lira considera que podría adoptarse en el país un enfoque más agresivo en la lucha contra la violencia, especialmente en lo relacionado con las pandillas.
“Las acciones orientadas a combatir el crimen podrían intensificarse, lo que implicaría un mayor apoyo a las fuerzas de seguridad en El Salvador”, indicó Lira.
Trump también dijo que aplicarían toda la legislación necesaria en la eliminación de las pandillas en Estados Unidos y que declarará a los carteles de droga como organizaciones terroristas.
La diputada Claudia Ortiz, de Vamos, consideró que El Salvador debe tener unas relaciones internacionales “sabias” y que con cualquier administración que llegue a gobernar en los Estados Unidos, debe trabajar con base a los intereses compartidos.
“Esto es de que más salvadoreños no tengan la necesidad de irse a Estados Unidos porque acá no hay suficientes oportunidades, porque acá corre riesgo su seguridad, porque acá no encuentran empleo. En esos puntos podemos construir una agenda en común con cualquier administración que llegue a la Casa Blanca y es lo que debemos hacer, velar por el bien de los salvadoreños que están allá”, afirmó.