El Tribunal Quinto contra el Crimen Organizado de San Salvador condenó a un pandillero a 130 años de prisión tras encontrarlo culpable de participar en cuatro asesinatos.
El condenado fue identificado como Oswaldo Alberto Armero Hernández, alias “Deimon”, perfilado por las autoridades como integrante de la pandilla 18 revolucionarios.
Uno de los asesinatos por los que fue condenado Armero Hernandez es el de un motorista de una unidad de transporte de la ruta 46, quien la noche del 9 de septiembre del 2016 fue acribillado cuando se encontraba en la terminal de microbuses de la empresa de transporte para la que laboraba.
Esa noche, las autoridades policiales reportaron el homicidio de Ricardo Ernesto Amador, de 50 años, en el punto de los microbuses localizado en la colonia Mireya, municipio de Mejicanos.
Según la información preliminar brindada por la Policía tras el homicidio, la víctima habría sido asesinada sólo porque vivía en una zona donde tenía presencia la pandilla rival.
Además, Armero Hernández fue condenado por su participación directa en los homicidios de José Granadeño, Claudia Romero e Israel Quinteros, cometidos entre 2015 y 2016, por considerarlos rivales.
Por lo que, el Tribunal le impuso la pena de 30 años por cada asesinado, sumando 120; más 10 años por el delito de proposición y conspiración de homicidio.